31.12.10

Antofagasta, un relato visual por Claudio Galeno 2010

LO MEJOR DEL AÑO, LA BIENAL DE SÃO PAULO

Lo mejor de este año ha sido la Bienal de São Paulo, y su entorno, incluida la Paralela. Es muy gratificante poder ver arte contemporáneo que incluye la arquitectura como una de sus artes. Lamentablemente la arquitectura por otro lado se ha vuelto demasiado hermética y ha dejado el arte de lado, como si no fuese parte de su espiritu, me refiero por ejemplo a la Bienal de Arquitectura de Santiago de Chile. Siempre he dicho que las bienales son tradición, y no puedes hacer una Bienal, sin reconocer las anteriores, y allí es donde gana São Paulo, en su continuidad de tradición, lo que no implica que no hayan rupturas.

Quiero mostrar algunos "destaques" o destacados de lo que fue la Bienal en el Parque del Ibirapuera para evidencia la interacción de arte y arquitectura.

Una vista aérea del Parque del Ibirapuera, una experiencia modernista por si misma.

La Marquise o Marquesina, obra de Niemeyer, un referente de la arquitectura y un gran parque motriz.

La realidad por sobre la marquesina.

El Pabellón de la Bienal, en su espacio que se conecta al parque, proyectada como una plaza abierta.

La obra se Susan Philipsz, que juega con la trama de celosias en blanco y negro, colocando la banderas de los paises en grises.

Uno de los homenajes de la Bienal, el grupo japonés High Red Center, y una obra donde participa el Hotel Imperal de Tokyo de Frank LLouyd Wright.

El Pabellón con la intervención de un muro en cartón de Carlo Bunga.

El otro lado de Carlos Bunga, el cartón como estructura, recordando al arte povera.

La instalación arquitectónica laberíntica de Dardot Morais.

Los interiores del laberinto de Dardot Morais.

Una de las obras polémicas de la Bienal, Nuno Ramos con sus jotes enjaulados y sus volúmenes escultóricos de tierra.

Los volúmenes de tierra hechos in situ por Nuno Ramos.

La luminosidad del pabellón de la Bienal sobre los black box de Marta Bogea que surgen de las trazas geométricas sobre el edificio de Niemeyer.

El diseño del montaje de Bogea, armaron una estructura laberíntica que sorprendían al visitante, obligándolo a investigar.

Un clásico de Helio Oiticica de 1970, la instalación "Ninhos", que en castellano significa nidos, una serie de espacios para domir, un gran mini hotel con mucha eroticidad.

Los UN Studio, Ben van Berkel y Caroline Bos, diseñaron el pabellón de las conferencias, con una arquitectura fluida.

La arquitectura digital de UN Studio llevada al corazón de Niemeyer.

La arquitectura liquida de los medios, recuerda las obras de Hadid, que a la vez homenajea a Niememyer.

La arquitectura contemporánea holandesa en el centro de la Bienal.


La iluminación confería una experiencia atmosférica al pabellón de conferencias de UN Studio.

La obra de Carlos Garaicoa incluía una serie de edificios donde habían realizado torturas en gobiernos dictatoriales, e incluyó el modernista Estadio Nacional en Santiago de Chile.

El artista chileno, formado como arquitecto, Alfredo Jaar expuso su obra "Los ojos de Gutete Emerita", basada en la acumulación de diapositivas de una fotografía de ojos sobre una enorme mesa de luz.

Una de la joyas arquitectónicas de la Bienal, la presencia de originales del Grupo Archigram, los ingleses pop, que llevaron a un extremo la cultura del consumo y de la tecnología con un lenguaje único, abstracto que hace uso de la publicidad y de la gráfica.

Archigram con parte de su proyecto para la Ciudad Instantánea.

Icarus, la invención futurista de un centro de lanzamiento aeroespacial de Kiluanji Ki Heenda, basada en arquitecturas que son elefantes blancos en Africa.

La arquitectura vegetal de Henrique Oliveira, irrumpiendo como las raices de la selva en las ruinas.

La experiencia espacial de un grillo o de un Ewok en la arquitectura orgánica de Oliveira, lograda mediante capas de madera laminada.


Las articulaciones en el interior de las raices de la madera.


Como remate, el videoarte de Tamar Guimarães en la Casa de las Canoas de Niemeyer en Rio de Janeiro, donde se contrastan el espacio de los sirvientes y de los invitados a una fiesta de glamourm usando actores de teleserie y con un guión que no relata nada sino es una excusa para detenerse a ver como se usa el espacio por personas ricas y pobres.

27.12.10

John Hejduk, "Casa para un poeta" en la Escuela Técnica Superior de Arquitectura de Barcelona, 2000

El año 2000 murió el arquitecto norteamericano John Hejduk, en aquel mismo año en la Escuela Técnica Superior de Arquitectura de Barcelona instalaron un modelo escala 1:3 de una de sus propuestas arquitectónica que exploraban el sintaxis del diseño. El modelo expuesto en el espacio de acceso a la Escuela, era parte de un exhibición derivada de un workshop realizado por Flores & Prats en el master Arquitectura, Crítica y Proyecto de la Escuela de Arquitectura del Vallés en 1999. Para el ejercicio del taller, el mismo John Hejduk había propuesto que el tema fuese construír un modelo a escala de la "House for a poet" o Casa para un poeta, su diseño para el proyecto no construido denominado Casa Guardiola, para Cadiz, de 1989.

Como se indica en la web (Expo John Hejduk) que explica el ejercicio: "La decisión de construir un proyecto no edificado con el fin de tratar de construirlo en un modelo a escala 1:3, parece un metodo de especial interés como una manera de hacer frente a las decisiones sobre la forma de como construir algo: que es la forma más concreta de acercarse a la construcción de un edificio, y los problemas que un constructor tendrá que resolver."

Finalmente la obra fue instalada en diversos sitios, el ETSA del Vallés, de Barcelona, de Valencia y más tarde en el CCCB.

Era impresionante llegar al edificio de la ETSAB en avenida Diagonal, en octubre del 2000 y encontrarse con esta gran instalación o escultura arquitectónica efímera. Tenía el recuerdo de haber tomado una fotografía, pero en realidad había hecho un croquis.

24.12.10

Una arquitectura del sitio Por: Anatxu Zabalbeascoa

© Fundacion Wiese / Museo CAO

Vía Del tirador a la ciudad / Blog de Anatxu Zabalbeascoa

La arquitecta Claudia Uccelli (Lima, 1965) quiso que su edifico para el Museo CAO, cerca de Trujillo, en Perú, demostrara una comprensión de las culturas indígenas asentadas en la costa norte de ese país. Así, aunque la arquitectura como paisaje y la volumetría de una construcción como topografía son dos cuestiones claves en la arquitectura actual, Uccelli quiso además que su edificio manejara la dualidad del claroscuro y de los llenos y vacíos en un intento de acercamiento a la estética de esas culturas.

¿Por qué no se pierde el edificio en la nada o el todo que es ese paisaje sin fin azotado por el viento? El inmueble, de hormigón -“un elemento compositivo sin distracciones”, explica Uccelli- y levantado con un presupuesto de 250 dólares el metro cuadrado, es una arquitectura orgánica. Tras erigir una estructura tensionada en el sitio arqueológico “El Brujo”, donde hoy se encuentra el museo, Uccelli ganó el concurso para levantar este edificio en el que los espacios se suceden en una planta que ella define como “Moche doméstica” –los antiguos habitantes de la zona-, a pesar de que el área construida es poco doméstica: ronda los 1.500 metros cuadrados.
© Fundacion Wiese / Museo CAO

El recorrido interior, las fugas visuales hacia el mar cercano, la dirección del viento, su azote, y la ausencia de límites emulan, desde el propio museo, la naturaleza del lugar. El nuevo edificio del complejo arqueológico busca difundir los hallazgos, señalar en el mapa turístico la Ruta Moche y crear un vínculo con las poblaciones “urbano-marginales” de los alrededores, como el pueblo de Magdalena de Cao, Santiago de Cao o Chocope, que ven en ese nuevo espacio un lugar donde reconocer sus orígenes.

La disposición de tres de los cinco volúmenes que forman el museo genera una plaza en su interior protegida del clima sumamente erosivo del lugar, que une al fuerte viento la arena. Esa plaza es el nexo que une y define la relación entre los volúmenes del museo. Sin embargo, ese espacio abierto, y sin embargo protegido, es también la paradoja de un lugar que se entiende mejor como paisaje que como arquitectura, pero que para poder vivirse precisa de la protección sutil, pero firme, de la arquitectura.

9.12.10

SEMINARIO PATRIMONIO ARQUITECTONICO Y TERREMOTO / SALA ÁS / ESCUELA DE ARQUITECTURA / UCN

Seminario Patrimonio Arquitectonico y Terremoto, martes 29 de Diciembre de 2010, de 9:00 a 13:00 y de 15:00 a 18:00 horas
Sala ÁS, Escuela de Arquitectura, Universidad Católica del Norte.
Relatores: Patricio Gross + Jorge Atria + Claudio Ostria + Lautaro Nuñez + Mario Cayazaya + Alexandra Joo.
Inscripción gratuita, cupos limitados.
Consultas: Emilia Palma, 55 355391 / epalma@ucn.cl
Organizado por la Escuela de Arquitectura - UCN / Academia Chilena de Ciencias Sociales, Politicas y Morales / Instituto de Investigaciones Arquológicas y Museo Gustavo Le Paige