La precursora "Semana Antofagastina" o las exposiciones modernas de Antofagasta.

A partir de la década de los treinta en Antofagasta se realizaba un exposición denominada "Semana Antofagastina, Exposición y feria de la industria, arte y comercio". La primera fue en julio de 1934 durante la administración del alcalde Horacio Silva Adriazola. Fue un evento de vanguardia que emulaba un modelo de grandes ferias que se venían desarrollando por todo el mundo desde 1851, y que a principio del siglo XX siguieron vigentes, siempre exponiendo los avances en cuanto tecnología, diseño y cultura. La exposición de Antofagasta se levantaba en los terrenos ganados al mar por las obras del puerto. El evento debe haber sido también una reacción a la depresión mundial de los mercados, de modo a estimular el mercado regional.

Hace poco supe de un escrito del historiador y ex alcalde Floreal Recabarren acerca de las ferias que precedieron al actual destacada Exponor. En la nota destaca justamente la Semana Antofagastina como un evento que culmina en manos del alcalde Humberto de Ramón Correa, por lo que debe referirse a la segunda exposición realizada en 1937.

A continuación la nota de Recabarren en el Mercurio de Antofagasta, del 16 de junio de 2011, publicado previamente en su blog "Historia y algo más" el 11 de junio:



"Antes de Exponor

Nada nace de la nada… La historia siempre nos invita a echar una mirada al pretérito con el propósito de aprender y explicarse los sucesos del presente. Por eso sería útil recordar a los políticos que eliminaran de sus discursos la frase “por primera vez en la historia”.

Ahora que la ciudad ha abierto sus puertas de par en par para recibir el desarrollo tecnológico de la industria y el comercio en Exponor, es correcto establecer que esta magna feria engarza sus raíces con esfuerzos realizados anteriormente.

El escritor criollo Mario Bahamonde escribió en una de sus novelas, una frase simple pero con real contenido: “de cuán lejos viene el tiempo”. Y es el tiempo el que arrastra a la historia. Exponor es una valiosa y hermosa realidad que permite a los ciudadanos elevar sus pechos orgullosamente y que, además, interpreta una aspiración de tiempos lejanos.

En efecto, en los albores del siglo XX cuando la República retomaba su vida democrática, los ciudadanos antofagastinos eligieron alcalde al Dr. Augusto de Ramón Correa (1935-1938) y el municipio estaba integrado por hombres de la calidad de José Papic, Melitón Muñoz y Oscar Rieste, se estableció “La Semana Antofagastina”. Entonces, se inició el establecimiento de una Feria-Exposición que funcionaba adyacente al puerto artificial.

No está demás advertir que esos años eran tiempos de crisis. El salitre había dejado de ser la “viga maestra de la economía nacional” y la pobreza galopaba sobre gran parte de los chilenos. Aún así el municipio porfiadamente intentó demostrar que el norte podía existir sin la famosa viga. El evento mostró la fábrica francesa refinadora de azúcar, la de baldosas, clavos, fideos y zapatos. Junto con la producción agrícola que de las quintas y la Fábrica de Cerveza y bebidas, etc.

Nuevos rumbos políticos cerraron esta puerta de exhibición. Sólo se reabrió con el joven ingeniero Santiago Gajardo y que culminó con la feria que se levantó en los terrenos del Estadio Regional, para celebrar el Centenario del Poblamiento de la ciudad, en 1966.

Exponor tiene destino: liberada de cambios políticos y en manos de los que pueden mantener, se ha creado para quedarse intentando vencer los tiempos."