30.6.16

Museo de sitio Pachacamac [Lima] entre los siete finalistas del premio MCHAP



Vía La República.

Buena señal para la arquitectura peruana. El museo de sitio de Pachacamac, diseñado por los arquitectos Patricia Llosa Bueno y Rodolfo Cortegana, ha sido seleccionado entre 175 nominados como uno de los 7 finalistas para el Premio MCHAP de las Américas, organizado por el Instituto de Tecnología de Illinois (IIT) de Chicago.

El museo Pachacamac en el citado concurso figura como una obra que representa lo mejor de la arquitectura de América, construida desde enero del 2014 hasta diciembre 2015.

El museo de sitio de Pachacamac, que se inauguró en febrero pasado, tuvo como principio impactar lo menos posible el santuario arqueológico, al incorporar el museo dentro del paisaje y su topografía.

Los arquitectos Patricia Llosa y Rodolfo Cortegana formaron en el año 2002 el estudio Llosa Cortegana Arquitectos. Ambos son egresados de la Facultad de Arquitectura y Urbanismo de la Universidad Ricardo Palma.

En la siguiente etapa, el jurado visitará las obras para otorgar el premio MCHAP.

18.6.16

Edificio Consorcio de +Arquitectos, arquitectura contemporánea de hormigón y quiebrasoles de madera. Av. Balmaceda 2556, Antofagasta

#Antofagasta #architecture #contemporaryarchitecture #brisesoleil #concrete #wood

Una foto publicada por Claudio Galeno (@claudiogalenium) el



Vía +Arquitectos: Brahm, Bonomi, Leturia, Bartolomé.

Ficha Técnica

Arquitectos: +arquitectos.
Constructora: Axis –Christian Gatica
Calculista: Gatica & Jiménez ing.
Mandante: CONSORCIO.
Ubicación: Antofagasta – Chile.
Superficie del terreno: 460 m2
Superficie construida: 2.400 m2
Año Proyecto: 2012 – 2015

Arte brasileño que devoró Europa: exposición Antropofagia y modernidad, arte brasileño en la Colección Fadel, 1908-1979

Vía Excelsior (México).

El Museo Nacional de Arte [de México] inauguró ayer la mayor muestra de obras modernas del país sudamericano, con más de 150 piezas

Por Luis Carlos Sánchez


Pintura 174: ritmos coplanares, Willys de Castro.

El 11 de enero de 1928, Tarsila do Amaral (1886-1973) le regaló al poeta y dramaturgo Oswald de Andrade –destacado exponente del modernismo brasileño y promotor de la Semana de Arte Moderno de Sao Paulo en 1922-, el lienzo Abaporu con motivo de su cumpleaños. Aquel cuadro habría de inaugurar todo un movimiento artístico. Tarsila y Oswald decidieron lanzar una revista donde publicaron el Manifiesto Antropófago que daría nombre a una de las más productivas etapas del arte moderno brasileño.

La propuesta era implantar un lenguaje moderno recuperando la cultura y las tradiciones autóctonas. En un acto “antropofágico”, el arte debía aprovechar y “devorarse” lo que le sirviera de las vanguardias europeas para acoplarlo a la realidad brasileña. Ese mismo año que Tarsila regaló Abaporu también pintó La muñeca, un óleo en el que aplicó lo que aprendió del cubismo, el fauvismo y el surrealismo, pero que encontró reflejo en su propia tierra, mucho más colorida y barroca.

La muñeca forma parte de las más de 150 piezas, entre pintura, escultura, instalación, obra gráfica y dibujo, que conforman la exposición Antropofagia y modernidad. Arte brasileño en la Colección Fadel. 1908-1979, con la que el Museo Nacional de Arte (Munal) ofrece desde hoy, un panorama de los diferentes movimientos artísticos modernos ligados a la construcción cultural de Brasil y hasta los inicios del arte contemporáneo en esas latitudes.

La muestra se articula de manera cronológica en tres módulos, proviene de la Colección Hecilda y Sérgio Fadel, que está conformada por más de mil 500 piezas que dan cuenta de la historia del arte en Brasil desde finales del siglo XIX a la actualidad. Subdivida en diferentes temáticas, la exposición ha sido curada por la argentina Victoria Giraudo, curadora del Museo de Arte Latinoamericano de Buenos Aires (Malba), a donde la muestra viajará después para exponerse con el nombre de Colección Fadel. Modernidad y vanguardia brasileña.

“Cada vez me siento más brasileña: quiero ser la pintora de mi tierra”, dijo alguna vez Tarsila do Amaral; que una mujer enarbolara el estandarte del arte plástico brasileño no es casualidad. Con el título Meninas brasileñas, la exposición Antropofagia y modernidad arranca su primer módulo con un recuento del arte de las primeras décadas de la república brasileña (la producción de café estaba reemplazando al azúcar y provocó que Brasil creciera económicamente), donde la mujer tuvo uno de los papeles más importantes.

Anita Malfatti (1889- 1964) es una de ellas. En la exposición se incluye la acuarela Desnudo femenino, que fue pintada entre 1915 y 1916. Malfatti tuvo influencia directa de las vanguardias europeas pero al escritor Monteiro Lobato, le pareció que sus cuadros habían sido hechos por internos de un manicomio. Esto provocó que ella dejara de pintar y sólo el aliento de Oswald de Andrade le hizo volver a la pintura. Otras “meninas” incluidas en la exposición son Maria Martins (1894-1973) con la escultura Uriapuru; Lygia Pape (1927-2004), de quien se exhibe una xilografía Sin título elaborada en papel arroz o Lygia Clark (1920-1988), de quien se muestra la escultura armable Bicho, de 1960.

Plantas, arena, aves silvestres, poemas-objeto, una televisión y raros objetos bautizados como Parangolé conformaron en 1967 una instalación ambiental titulada Tropicalia, que el artista Hélio Oiticica (1937-1980) montó, inspirado en las favelas, en el Museo de Arte Moderno de Río de Janeiro. La obra acabó fundando una nueva etapa del arte brasileño, que retomaba el pensamiento antropofágico, pero llamaba a una renovación cultural mediante la reivindicación del mestizaje.

La vegetación, el agua, las favelas, la samba, la mulata brasileña o los temas oníricos, marcan la producción artística brasileña posterior. En este núcleo, aparecen en la exposición obras como Floresta tropical de John Grasz (1891-1980); Colina de favela y O lago de Tarsila do Amaral; Rueda de Samba de Emiliano di Cavalcanti (1897-1976); Las bahíanas del mismo Grasz o Retrato de Bur-le Marx de Flavio de Carvahlo (1899-1973).

Con el surgimiento en 1951 de la Bienal de Sao Paulo, que se inspiraba en la Bienal de Venecia, se generó ahora la necesidad de experimentar y cuestionar los elementos de representación hacia un arte abstracto. Antropofagia y modernidad muestra la antesala del arte contemporáneo brasileño a través de artistas como Alfredo Volpi (1896-1988), de él se exhibe Elementos geométricos; Luiz Sacilotto (1924-2003); Maurício Nogueira Lima (1930-1999), del que se incluye Composición concreta.

16.6.16

Ciudadanos de Antofagasta diseñarán su propio borde costero

Vía El Ciudadano.



Con el objeto de fomentar la participación ciudadana en la toma de decisiones de la ciudad, el plan CREO Antofagasta lanzó el concurso “Borde costero: diseña tu pavimento”, con el que se pretende que los antofagastinos de todas las edades presenten sus diseños para cambiar el pavimento de los futuros proyectos del borde costero de Antofagasta, de modo de darle un nuevo look a la ciudad a fin de atraer el turismo nacional y extranjero.

El resultado final del pavimento, inspirado por el diseño ganador, tendrá un alto estándar visual, paisajístico y constructivo, favoreciendo su continuidad en todo el borde costero de la ciudad y colaborando a reforzar el sentido de pertenencia de sus habitantes.

Los únicos requisitos para participar son: ser habitante de Antofagasta y tener las ganas de imaginar, dibujar o proyectar un diseño atractivo para la ciudad. No es necesario contar con experiencia alguna en arquitectura o diseño. El formato también es libre, ya sea a través de un dibujo, una pintura, o un collage. Una vez preparado el diseño, se deberá enviar a CREO a través de la web www.concursobordecostero.cl desde hoy, hasta el 10 de julio, día que se cerrará esta primera etapa del proceso.

Las propuestas serán evaluadas por un comité de jurados expertos y representantes de diversas instituciones y el 15 de julio se darán a conocer los cinco mejores diseños presentados, que serán sometidos a votación popular a través de las redes sociales y de la página del concurso (www.concursobordecostero.cl). Se valorará la identidad local, la calidad del patrón y la factibilidad de la propuesta.

El ganador se conocerá el 8 de agosto y se llevará como premio $ 1 millón. Además, se entregarán 4 menciones honrosas de $400.000.

Para Alejandro Gutiérrez, Director Ejecutivo de CREO Antofagasta, “el concurso Borde Costero es una invitación para todos los antofagastinos a imaginar, dibujar y juntos elegir cómo serán las veredas del borde costero de la ciudad, pero además es un aporte al país y su desarrollo turístico”.

Sobre Creo Antofagasta

Creo Antofagasta es un plan que nace para enfrentar el desafío de crecimiento que tiene la ciudad, con un fuerte sentido de mejora en la calidad de vida de la comunidad. La visión de Creo Antofagasta, proyecta la ciudad en la que su gente quiere vivir, a través de un Plan Maestro que propone el crecimiento urbano sostenible, al año 2035. Es fruto de una alianza público-privada que incluye al Gobierno Regional, la Municipalidad de Antofagasta y representantes de la ciudadanía y de la empresa privada entre otros.

15.6.16

Inundaciones en Antofagasta en marzo de 1934, Periódico La Libertad (Madrid)

El libro de Lanza y Urrutia sobre Catástrofes en Chile, respecto del año 1934, se refieren a los temporales desarrollados en mayo y junio, desde Copiapó a Magallanes, con más de catorce muertos y más de treinta heridos, miles de damnificados, caminos destruidos, puentes deteriorados, vías férreas interrumpidas, deslizamientos de tierra y trombas marinas.

Sin embargo no se refieren a lo ocurrido en marzo de 1934 en Antofagasta, que al parecer fue una suerte de preludio de los sucesos que luego azotaron el país.

El periódico La Libertad de Madrid, el 29 de marzo de 1934, publicó una breve nota sobre la catástrofe:

"INUNDACIONES EN ANTOFAGASTA: Cinco muertos y un centenar de heridos
Cinco personas han resultado muertas y más de cien heridas a consecuencia de las inundaciones sufridas en la región de los Andes. Se cree que las aguas llegarán hoy en su inundación hasta Antofagasta. En previsión de que esto pueda ocurrir se han dado órdenes para que sean evacuados los alrededores.
El ferrocarril internacional y el del Estado han experimentado desperfectos que alcanzan el valor de centenares de miles de pesos. Se ha establecido un servicio especial de vagones para el transporte de alimentos. Muchas personas han sido atacadas por el pánico y abandonando sus casas han huido a los montes próximos."

14.6.16

Lanzamiento de la Segunda edición de Revista de Divulgación Histórica de Antofagasta CIIAR

Centro de Investigación Histórico Cultural Isaac Arce Ramfrez y Museo de Antofagasta invitan al acto de lanzamiento de la Segunda edición de Revista de Divulgación Histórica de Antofagasta CIIAR, que se efectuará el día miércoles 22 de junio del presente año 2016, a las 18:30 hrs. en el salón auditorio del Museo de Antofagasta, ubicado en José Manuel Balmaceda 2786, esquina Simón Bolívar, acceso por Plaza de la Cultura "Osvaldo Ventura López".

La edición de la publicación fue financiada por el Gobierno Regional de Antofagasta con recursos del Fondo Nacional de Desarrollo Regional, F.N.D.R., 2% Cultura, Año 2015 aprobados por el Consejo Regional de Antofagasta.

Consultas:
centro.isaacarce@gmail.com, museo.antofagasta@museosdibam.cl
fonos: +56 55 2227016/ +56 55 2221109.

13.6.16

Central Clasificadora de Correos de Chile en Estación Central en Santiago (1971-1978), arquitectos Boris Guiñerman y Bresciani



Según Maximiano Atria en La Segunda.

"Un edificio industrial único. Se ubica a un costado de la Estación Central y está amenazado por su obsolescencia técnica. Su abandono parcial es un riesgo para su supervivencia a futuro, sobre todo considerando la presión de un barrio comercial muy activo en su vecindario".

Según Memoria 2013 Correos de Chile:

"El edificio de Calle Exposición representa una construcción vanguardista de del año 1975, construido por los arquitectos Guiñerman y Bresciani, destaca por su Exo-estructura/Exo-esqueleto, estructura externa similar a lo que sería una cascara. Ubicado a pasos de Estación Central, su diseño funcional permitió desarrollar una logística perfecta para el despacho de carta a todo el país durante más de 40 años."



Perú en Venecia, por Jorge Sánchez Herrera – Nómena Arquitectura

Vía Publimetro Perú.



POR JORGE SÁNCHEZ HERRERA – Nómena Arquitectura
Arquitecto/Urbanista
jorge@nomena-arquitectos.com

En los últimos años, la arquitectura y el urbanismo latinoamericano han tenido un rol protagónico en el panorama global. Colombia tiene en Bogotá y Medellín a dos ejemplos mundialmente reconocidos por sus propuestas en materia de movilidad, inclusión social y espacios públicos. El trabajo de los arquitectos chilenos despierta un interés cada vez mayor, ya no solo por sus trabajos individuales sino por una identidad colectiva cada vez más definida. Aunque en menor escala lo mismo puede decirse de Paraguay y Uruguay. Ni qué decir de Argentina o Brasil que, como en el fútbol, tienen ejemplos y representantes de sobra. Del Perú poco o nada. Al menos hasta ahora.

Hace algunos días el pabellón peruano presentado en la 15° Bienal de Arquitectura de Venecia fue premiado con una mención especial al mejor pabellón nacional. Reconocimiento compartido con los pabellones de Japón y España (que se llevó la máxima distinción). El jurado reconoció la muestra peruana “por haber portado la arquitectura a un rincón remoto del mundo, haciendo de este un lugar para la educación y al mismo tiempo un medio de proteger la cultura amazónica”.

El jurado se refiere a la muestra “Our Amazon Frontline”, curada por los arquitectos Sandra Barclay y Jean Pierre Crousse, quienes decidieron poner en el mapa del mundo el trabajo que viene realizando el Ministerio de Educación a través de su programa para la educación “Plan Selva” (al que le dediqué una columna semanas atrás), que busca reducir la brecha de infraestructura educativa en la Amazonía. En palabras de los curadores: “(…) el Perú lucha ahora para la salvaguarda del bosque amazónico a través de la educación, empoderando las comunidades indígenas para que sean ellas mismas los custodios de su territorio. En este esfuerzo, la arquitectura provee el espacio para esta significativa transformación cultural.”

La noticia no es menor. La Bienal de Venecia es el evento de arquitectura más importante en el mundo y este año, con el lema “Reportando desde el frente” bajo la curaduría del arquitecto chileno Alejandro Aravena, se planteó desviar los reflectores de los arquitectos para ponerlos sobre aquellas historias locales que normalmente están condenadas al olvido. Lo importante, más allá del premio en sí, es la enorme visibilidad que está recibiendo esta política pública de educación en la selva, y por tanto, sus altas probabilidades de ser continuadas por un nuevo gobierno. En un país acostumbrado a reinventar la rueda cada cinco años, ese es el mayor premio.

Vaya un gran reconocimiento a aquellos que han hecho realidad la idea de que el Perú tenga un pabellón nacional en La Bienal de Venecia por los próximos 20 años, a los curadores y productores, al Minedu y, nuevamente, al equipo de arquitectos detrás del área de infraestructura del Plan Selva.

Aprueban recursos para conservar edificio patrimonial [ex Resguardo Marítimo de Antofagasta, arq. Leonello Bottacci]

Vía El Mercurio de Antofagasta.

Balmaceda Arte Joven [Antofagasta], un espacio para potenciar el talento local

Vía El Mercurio de Antofagasta.



CULTURA. La institución, dependiente de Fundación Minera Escondida, ofrece a sus usuarios siete talleres y dos compañías, una de teatro y otra de danza.

Daniel Contreras Palma

Desde la danza pasando por la música, el teatro, la literatura y las artes visuales, la apuesta de Balmaceda Arte Joven Antofagasta (BAJ) se ha enfocado en desarrollar e impulsar las aptitudes artísticas de los jóvenes y niños de la región.

Es así, que durante sus seis años de funcionamiento en la región son más de tres mil los usuarios que han pasado por alguno de los talleres o programas de extensión que ofrece anualmente esta institución, que trabaja al alero de Fundación Minera Escondida.

Balmaceda Arte Joven además cuenta con compañías de teatro y danza, que se han constituido con los mismos participantes de talleres, aportando a la creación de montajes regionales y siendo de paso un semillero de futuros artistas para la región.

En esta entrevista el director regional del organismo, Jorge Wittwer, explica la labor que ha desarrollado Balmaceda Arte Joven en la región, tanto en la formación de potenciales artistas como de un público cada vez más interesado en consumir cultura.

Agente regional

¿Cuál es la propuesta de Balmaceda Arte Joven en la región?

-Nuestro principal objetivo no es ser un agente que solo funcione en la comuna de Antofagasta, sino que hemos tratado de ser un agente regional. Nosotros tenemos dos áreas de trabajo: educación y extensión. En educación lo que hacemos son talleres artísticos, principalmente para jóvenes. Al año impartimos cerca de 42 talleres enfocados en seis áreas como son música, artes visuales, audiovisual, literatura, teatro y danza.

¿Cuál es el perfil de los usuarios que acuden a los talleres que se imparten?

-El perfil de nuestros usuarios está entre los 15 y 30 años. Según nuestros lineamientos deben ser chicos que no tienen acceso a poder formarse o desarrollar sus inquietudes artísticas. Por lo tanto, son chicos que vienen de sectores vulnerables o generalmente de colegios municipales. Nuestro misión es poder orientar a gente que no ha tenido la oportunidad de tomar este tipo de talleres y poder entregarles todas las herramientas para que sus inquietudes artísticas puedan desarrollarse.

¿Se sienten formadores de futuros artistas?

-Nosotros no perseguimos que nuestros usuarios se conviertan en artistas. No es nuestro objetivo. Evidentemente hay muchos chicos que después de pasar por nuestros talleres pueden tomar la decisión de formarse en algún área artística. Somos una especie de trampolín artístico. Tenemos varios casos de chicos que han tomado alguno de nuestros talleres -estudiando química por ejemplo- y se han cambiado a una carrera artística.

En los seis años que llevamos funcionando han pasado más de tres mil jóvenes por nuestros talleres. Por temporada ofrecemos siete talleres donde participan entre 130 y 150 chicos.

La música es otro de los aspectos relevantes de su labor, ¿cómo se está trabajando en ello?

-Minimal es parte del programa de extensión de Balmaceda Arte Joven. Este ciclo de música tiene que ver con potenciar el talento local, preocupándonos que sean bandas que tengan producción propia. Para ello tenemos un súper aliado que es el sello independiente Indiana.

Hoy también estamos enfocados en sumar nuevos usuarios incorporando este año un ciclo de teatro infantil, porque creemos que es necesario criarlos en el hábito de asistir como público a consumir cultura. Si no nos preocupamos de generar actividades para los más pequeños estamos perdiendo la posibilidad de formarlos como público.

Temporada

¿Qué actividades se vienen para el resto del año en materia artística?

-El próximo 14 de junio inauguramos la exposición de Antonieta Clunes con su proyecto "Dividual" por con convocatoria. Nosotros realizamos tres convocatorias al año, una para la sala de Antofagasta, otra para el pasillo de acceso y también tenemos un espacio en San Pedro de Atacama. Este lunes también empezamos con nuestra exposición Foto Antofagasta 2016.

Dentro del área de extensión de BAJ existen dos compañías, una de teatro y otra de danza. Cada año la compañía de teatro realiza un casting para sumar nuevos integrantes que finaliza con un montaje que luego recorre la región.

¿Qué está preparando la compañía de teatro de BAJ para esta temporada?

-El 17 de junio reestrenamos "El Chilombiano", que es una obra de nuestro elenco, dirigido por Pamela Meneses. Con este montaje vamos a itinerar por algunas comunas de la región. Es un tema bastante importante para la región porque trata el tema de la migración, sobre todo del incremento de la población de ciudadanos colombianos.

12.6.16

La Bienal de Arquitectura chilena bajo la lupa



Vía La Tercera.

En 2017 se cumplen 40 años del evento nacido en dictadura y que por segundo año se hará en Valparaíso. Arquitectos y directores de ediciones anteriores evalúan sus hitos y desafíos pendientes.

Por Denisse Espinoza.

El grupo no superaba las 10 personas, y sin embargo sus reclamos hacían eco de una problemática que iba más allá de los límites barriales. En 2015, aprovechando la presencia de autoridades, entre ellos el ministro de Obras Públicas y el intendente de la V Región, un grupo de vecinos del Cerro Barón irrumpió en la apertura de la Bienal de Arquitectura y Urbanismo que por primera vez se realizaba en el Parque Cultural Valparaíso. Se manifestaron en contra del proyecto habitacional del reconocido arquitecto Mathias Klotz que se está construyendo donde antes estaba el Hospital Ferroviario. “Fuera mafias inmobiliarias”, rezaba la pancarta con la que subieron al escenario, para luego ser aplaudidos por la mayoría de los 300 asistentes a la ceremonia.

La “funa”, como se la calificó al otro día en la prensa local, marcó el inicio de una de las ediciones más exitosas en la historia de la bienal, que atrajo a más de 30 mil asistentes. Días después, se desataba otra vez la polémica con la exposición del proyecto de ampliación del Terminal 2 del puerto de Valparaíso, que mantiene dividida a la ciudadanía y la autoridades.

“Fue una bienal potente y muy convocante; fue un acierto moverse a Valparaíso, donde la conservación del patrimonio y el desarrollo urbano es un problema más urgente que nunca, discutir ese tipo de temas es el objetivo de una bienal”, dice el arquitecto Sebastián Gray, quien era entonces el presidente del Colegio de Arquitectos, organizador del evento, el que acaba de cerrar su convocatoria para elegir al curador de la muestra del próximo año. Hasta el 2012 eran elegidos a dedo.

La de 2017 será una edición especial: con el lema Identidad y Futuro se celebrarán, de nuevo en Valparaíso, las cuatro décadas de la primera versión inaugurada en 1977 en el Museo de Bellas Artes, que tampoco estuvo exenta de polémicas. En esa ocasión, un recién egresado arquitecto Humberto Eliash, como parte del grupo CEDLA, presentó su proyecto para remodelar Santiago Poniente con edificios de baja altura, oponiéndose a la visión expansiva de varios arquitectos presentes. “Hubo el tremendo debate, nos fuimos a los gritos incluso. Nosotros éramos independientes, pero estábamos bien organizados, las universidades estaban en el bando contrario”, recuerda hoy Eliash.

Aunque según Víctor Gubbins, participante de esa primera edición dirigida por el fallecido Cristián Fernández, no hubo problemas de censura o represión, sí recuerda un impasse en la bienal de 1983, cuando se premió al arquitecto Fernando Castillo Velasco, quien había estado exiliado. “El era muy querido, los corredores estaban llenos de gente esperándolo y en eso llega el ministro de Vivienda vestido de milico: provocó indignación. Algunos intentaron sacarlo y tuve que intervenir, porque igual se le había invitado, pero no correspondía que él manifestara así su autoridad”, dice Gubbins.

Para el arquitecto de Mil M2, Fernando Portal, quien ha investigado la evolución de la bienal, el evento siempre ha funcionado como un termómetro de lo que sucede en el país. “La bienal ha sido eficiente en reconocer los factores políticos y públicos y generar debate, aunque a veces el lenguaje hermético que se usa en la profesión ha impedido que el público participe más”, señala.

Acercarse cada vez más a la ciudadanía y convertir la bienal en un evento transversal es aún uno de los principales desafíos. En ese sentido la última versión marcó un punto de inflexión, concuerdan los arquitectos. “Hasta hace unos años atrás la bienal aún era un entusiasmo de los arquitectos, pero eso se ha ido ampliando y profesionalizando, hoy cada vez en más un encuentro entre la ciudadanía y los arquitectos”, dice Pilar Urrejola, actual presidenta del Colegio de Arquitectos y única mujer en dirigir una bienal, en 1997. Para ella, otro de los temas pendientes es la descentralización. “El próximo año volveremos a Valparaíso, pero la idea es que podamos tener bienales itinerantes, poner en valor las regiones. El centralismo no permite valorar la diversidad de arquitectura que tenemos en todo el territorio. Ser capaces de hacer una bienal en Iquique o Chiloé, sería de lo más pertinente”, agrega.

Precariedad y pertinencia

Más antigua incluso que la Bienal de Arquitectura de Venecia, nacida recién en 1980, el evento chileno es hasta hoy uno de los más prestigiosos de la región, junto con la Bienal de Sao Paulo, Buenos Aires, Quito y Chicago, y muy pronto comenzó a recibir importantes visitas internacionales. “La primera fue muy local, nadie quería venir a Chile por el tema político, pero luego el país se abrió, sobre todo desde los 90”, cuenta Eliash.

En 1991, una poco conocida Zaha Hadid dio una exitosa charla en el Museo de Bellas Artes, y cinco años antes había estado el portugués Alvaro Siza. También vinieron los japoneses Shigeru Ban, Kasuyo Sejima y el español Rafael Moneo. Todos ganaron posteriormente el Premio Pritzker.

Entre las debilidades históricas del encuentro está la falta de presupuesto. El arquitecto Felipe Assadi, a cargo del montaje de la bienal de 2008, es crítico en ese aspecto y en otros. “A pesar de quienes dicen que la bienal es fantástica, la realidad es que hacerla es un parto, un castigo del que tampoco es fácil escapar. Está el tema de los recursos que hay que conseguir con mucho trabajo; en mi caso decidimos hacerlo todo con material reciclado, nada fue comprado y todo se reutilizó, pero también se ha vuelto una muestra aburrida que ha perdido su objetivo central y que es mostrar el estado del arte de la profesión, lo que ha pasado en dos años. No creo en las curatorías que fuerzan temas”, dice Assadi.

Para Pilar Urrejola, sin embargo, la precariedad siempre puede ser una oportunidad. “Los arquitectos tenemos que estar acostumbrados a trabajar con lo que hay y en ese caso ser capaz de activar el ingenio sin dejar de lado el sentido común. Eso es justamente lo que ha planteado Alejandro Aravena en la actual Bienal de Venecia y es buscar soluciones creativas a problemas de escasez”, dice la arquitecta, quien explica que la bienal siempre se ha financiado con aportes de empresas, ministerios y ahora último participando de fondos concursables.

En ese sentido, entre los montajes más recordados está la bienal de 1987, dirigida por Fernando Castillo Velasco, quien logró por primera vez reconectar el Museo de Bellas Artes con el Museo de Arte Contemporáneo; en las década reciente, la bienal de 2000, a cargo de Sebastián Irarrázabal y dirigida por Humberto Eliash, en el que la Estación Mapocho se llenó de containers marítimos que llamaron la atención del público; o la bienal de 2010, dirigida por Guillermo Hevia en el Museo Histórico Militar, que debió replantearse completamente debido a la urgencia de la reconstrucción tras el terremoto del 27/F.

11.6.16

Escuela Nacional de Artes de Cuba: edificios en ruina, a punto de ser devorados por los árboles


Cuba: Artista francés captura ruinas de Escuela Nacional de Arte.

Vía Cibercuba.

Por Federico Beltrán.

En su momento, cuando fue concebida hace más de cinco décadas, la Escuela Nacional de Artes de Cuba constituyó quizás uno de los ejemplos más prometedores de lo que la Revolución Cubana se convertiría algún día. El proyecto, modernista y supra revolucionario serviría para mostrarle al mundo lo que iba a ser, no la nueva arquitectura cubana, sino la Revolución misma.

Hecho a base de ladrillos y con domos de terracota, el complejo de edificios, donde la pujante revolución cubana enseñaría a los más desfavorecidos el arte de la pintura, la danza y la música, es actualmente un amasijo de bloques constructivos que parece desaparecerá en cualquier momento tragado por la maleza.

En los años en que comenzó a construirse, un cambio en las mentalidades políticas de la isla, convirtió un proyecto de diseño avanzado, estilizado, utópico e idealista – por decirlo de algún modo, un fiel reflejo de la Cuba de los 60 – en algo burgués, desconceptualizado y poco provechoso.

En cuestión de meses, aquella arquitectura novedosa se vio suplantada por una más utilitaria. Censores y burócratas acusaron a los arquitectos (Ricardo Porro, Vittorio Garatti y Roberto Gottardi) de ser unos “egocéntricos burgueses y aristócratas culturales”. Años después se marcharon del país buscando exilio en París, Porro, y acusados de espionaje y perseguido, Gottardi.

Numerosos han sido los intentos por parte de brigadas constructivas del estado cubano por devolver a su estado original, al menos las dos únicas edificaciones que pudieron ser completadas. Las otras tres quedaron como la historia, incompleta, en espera de que alguien en algún momento se acordase de ellas, y eso, nunca sucedió.Ahora, en el 2016, luego que fuese incluido en la lista de monumentos mundiales para preservar, con el auspicio del gobierno italiano, del gobierno cubano y de la labor filántropica del bailarín Carlos Acosta pareciera que al menos, los dos edificios que más riesgo corren de colapsar inmediatamente, pudieran ser restaurados.

Desde el año 1965, en que las obras fueron detenidas, hasta el año 2011 en que el Estado Cubano la declaró Monumento Nacional, las paredes de la Escuela Nacional de Artes de Cuba han sufrido el embate de ciclones, lluvias, derrumbes, filtraciones, deterioros, robos, sin que a nadie pareciera importarle.

Pero pasaron cuatro años más, hasta que en el 2015, otra vez el Gobierno Cubano estableciera una comisión cuyos miembros, algunos vinculados estrechamente con el oficialismo en la isla, comenzaron a colaborar con la UNESCO, el Ministerio de Cultura y el embajador de Italia en Cuba, para preservar el lugar para las futuras generaciones.

Tiempo es oro, y es hora de actuar. Aún estamos a tiempo de salvar algo, antes que la “selva” devore lo poco que ha ido quedando.

Louis Vuitton | Cruise 2017 Full Fashion Show | Museo de Arte Moderno de Niteroi, Oscar Niemeyer

Exposición Serralta - Clémot: arquitectura uruguaya se muestra


Gimnasio. © Arquitectura Celeste.

Vía Intendencia de Montevideo.

Una muestra de trabajos de los arquitectos uruguayos Justino Serralta y Carlos Clémot estará abierta al público del 13 al 24 de junio en el atrio de la Intendencia (Av. 18 de Julio 1360).

La Facultad de Arquitectura de la Universidad de la República presenta una síntesis de su trabajo a través de proyectos y obras arquitectónicas. Serralta (1919-2011) y Carlos Clémot (1922-1971) concidieron en el taller del francés Le Corbusier.

De regreso a Montevideo se asociaron y desarrollaron varias obras destacadas, como el edificio Maspons (Uruguay y Andes); el colegio La Mennais, con Eladio Dieste; y la casa Acosta y Lara en el Prado.

Su proyecto más ambicioso fue el Hogar Estudiantil Universitario, resultado de un concurso ganado por ambos en el año 1959, que quedó inconcluso por falta de recursos. Posteriormente terminó siendo la sede de la Facultad de Ciencias.

El público podrá visitar esta muestra de lunes a viernes en el horario de 10 a 16.

9.6.16

Project Tango de Google: Tu teléfono ya podrá hacer un mapa de lo que te rodea



Vía La Tercera.

Luego de tres años en desarrollo, Project Tango de Google será capaz de escanear una habitación y mapearla en 3D, permitiendo su aplicación en varias áreas.

Imagina que tu smartphone es tan inteligente que capta tu entorno: el tamaño de la habitación, la ubicación de puertas y ventanas, y la presencia de otras personas. ¿Qué harías con esa información?

Estamos por averiguarlo. El jueves, Lenovo le ofrecerá a los clientes la primera oportunidad de comprar un teléfono con el Project Tango de Google, que lleva tres años en desarrollo, en un intento de empapar a las máquinas con un mejor conocimiento de lo que las rodea.

Rastreo de ubicación a través de GPS y torres de celulares le dicen a las aplicaciones en dónde estás, pero no mucho más. Tango utiliza software y sensores para rastrear movimiento y calcular el contorno de habitaciones, dándole la habilidad al nuevo teléfono de Lenovo de hacer mapas de interiores. Eso es un bloque de construcción crucial para una prometedora frontera de la "realidad aumentada", o la proyección digital de información e imágenes realistas en un ambiente real.

Si Tango cumple con las expectativas, quien compre muebles podrá descargar modelos digitales de sillones, sillas y mesas de centro para ver cómo se verían en sus salas. Los niños que estudian la era mesozoica podrán poner un tiranosaurio en su casa o salón, y hasta tomarse selfies con uno. La tecnología incluso sabrá cuándo mostrar información sobre un artista o escena representada en una pintura mientras caminas por un museo.

Tango podrá crear mapas internos de hogares y oficinas al instante. Google no tendrá que construir previamente una base de datos de mapas, como lo hace con servicios existentes como Google Maps o Street View. Aun así, Tango traería nuevas preocupaciones sobre la privacidad si los controles no son suficientemente estrictos para evitar que se compartan mapas con apps no autorizadas o sean robadas por hackers.

El debut de Tango se da en un contexto de caída en las ventas de teléfonos. Mucha gente ha decidido actualizar sus smartphones en parte porque no se han emocionado con los avances tecnológicos que han llegado al mercado en años recientes. Los teléfonos con nueva e intrigante tecnología podrían impulsar las ventas.

Pero la tecnología de mapeo de habitaciones de Tango probablemente siga siendo muy abstracta para atraer a mucha gente de inmediato, considera Ramo Llamas, analista del grupo de investigación IDC.

"Para la mayoría de la gente, aún está varios pasos adelante de lo que pueden mentalizar, así­ que será un largo periodo de gestación", dijo Llamas.

Google planea integrar al Tango a otros teléfonos, pero este año se enfoca en la sociedad con Lenovo, según Johnny Lee, un ejecutivo de Google que supervisó al equipo que desarrolló la tecnología.

An Icon of Midcentury Organic Modern Architecture (Bruce Goff) Is Destroyed

Vía Hyperallergic.

by Allison Meier on May 11, 2016



A spiraling 1955 house that was considered one of the icons of 20th-century organic modernism has been destroyed. And not just demolished but ripped out of the ground, as Bruce Goff’s Bavinger House in Norman, Oklahoma, had been built right into the state’s red earth. Its corkscrew shape, constructed over several years with artists Nancy and Eugene Bavinger and local University of Oklahoma (OU) students, contained floors lofted on cables above a stone ground embedded with a creek. The whole structure was almost hidden by a grove of blackjack trees.



On April 28, Caleb Slinkard reported for the Norman Transcript that “all that is left of the Bavinger House is an empty clearing.” According to Slinkard, the demolition was confirmed by Bill Scott, president of the Friends of Kebyar, a nonprofit dedicated to the preservation of organic architecture; Scott called the site where the house once stood “scorched earth.” Slinkard added that “multiple calls” to Bob Bavinger — the son of the house’s original owners and its owner at the time of demolition — “were not returned by press time.”

The news had been shared, three days earlier, in the Save Wright forum by Zachary Matthews, who posted an April 17 email from “The Bavinger Boys.” The text reads: “The Bavinger House receives the ‘It’s Gone” award.'” (This is seemingly a reference to the accolades the house received, such as the AIA Twenty-Five Year Award in 1987 and a listing on the National Register of Historic Places in 2001.) A photograph shows a CAT excavator and not much else, the stone, glass, and metal remains of the house all hauled away.

Unfortunately, the destruction of the Bavinger House is not surprising. Back in 2011, the home appeared to suffer damage in a storm, and when a crew with News 9 attempted to see the house, they were “greeted with gunfire.” Then, Bob Bavinger told the Norman Transcript that he’d had to “remove the target,” meaning the house, as he thought OU was attempting to get in the way of his own restoration efforts. The status of the house remained something of a mystery (it sat on private property, accessed by a rural road) until last July, when PraireMod reported that it had been contacted by Bob Bavinger’s son, Boz, who claimed to be putting the property up for sale for the price of $1.5 million. An accompanying photograph showed the base of the building mostly intact, although the spire had been snapped off and support cables were mangled.

The Bavinger House was “seen by many as the crowing achievement of [Bruce Goff’s] extensive body of work,” wrote Greg LeMaire at ArchDaily in 2011. The following year, I wrote about Goff’s endangered legacy for Hyperallergic; the Bavinger House was still in limbo then, along with several of his other projects. Goff was one of the most creative DIY architects of the 20th century, often repurposing household objects (like pie tins for light fixtures), involving owners in construction, and connecting with natural settings in a tactile way, much like his mentor Frank Lloyd Wright. A 1951 Life magazine article on Goff’s Ford House in Aurora, Illinois, called him “one of the few US architects whom Frank Lloyd Wright considers creative” and said he “scorns houses that are ‘boxes with little holes.’” The Ford House was far from a box — more like a bird cage containing a living space — and like many of Goff’s projects received a mixed reception. The Fords famously put up a sign in their yard, proclaiming, “We don’t like your house either.”

Bruce Goff

If you’ve seen a Goff building and are not from the Midwest or Southwest, it was likely the curving Pavilion for Japanese Art at the Los Angeles County Museum of Art (LACMA), which lets in light through fiberglass panels. I am from Oklahoma and happen to have grown up going to a Bruce Goff church — the 1961 Redeemer Lutheran Church in Bartlesville — marveling at his Space Age–themed 1963 Play Tower, and visiting the elaborate Shin’en Kan home, built between 1956 and 1974. The ethereal blue cullet that often accented his work, appearing gemlike against rough, muted stone; the unexpected angles; the mosaics that seemed ordinary until they caught the sun with incredible radiance — are all familiar to me, and in many ways shaped an appreciation for living with modern architecture that endures today.

But since Goff did some of his most enduring work with private homes, preservation can be precarious. Shin’en Kan, for example, was lost to a 1996 arson that was never solved. Nevertheless, there has been some recent attention that inspires hope. Last year, the 1957 Comer House in Dewey, Oklahoma, was placed on the National Register of Historic Places; it has elegant support cables similar to those of the Bavinger House and was vacant for years, until being purchased in 2012 by a new owner, who worked on its restoration and now hosts private tours. The 1964 Nicol House in Kansas City, likewise, is currently cared for by a private owner who’s been preserving its triangular windows and hexagonal pool. The 1948 Myron Bachman House in Chicago, with its strange peaks in corrugated aluminum and brick, spent two years on the market before finding a new owner last month.

Some of his community spaces have also been restored. In 2014, a newly repainted Play Tower was reinstalled in Bartlesville, after vandalism and decades of decay, while the 1951 Hopewell Baptist Church in Edmond, Oklahoma, has a major restoration campaign underway. When I visited the church in 2011 (the pastor was nice enough to let me in when I stopped by out of curiosity), the shingles were falling off, and the floor was so caved in you couldn’t walk more than a couple of steps. Now it’s been repainted to its original red, with silver on the oil pipes that hold it up (they’re similar to the oil field–sourced material that once supported the Bavinger House).

Goff stated that with the Bavinger House, he “wanted to do something that had no beginning and no ending,” where life flowed through like water. Bedrooms were positioned on hovering platforms and closed with curtains; inside, the space was as cool as a cave in summer. A 1955 issue of Life magazine featured images of the “most gaped-at new house in the US” and described life in this “55-foot-high oil well pipe inside a round tower”:

A good deal of its ground floor is water. Its rooms are suspended saucers. Its tower sticks out of the trees like the sail of a Chinese junk. It has drawn so many sightseers that the Bavingers now charge $1 a person for the privilege of looking at the house. So far they have collected $4,000.

All of that is gone now, but you can still take a digital tour thanks to this video by Skyline Ink, created for the 2010 exhibition Bruce Goff: A Creative Mind at OU’s Fred Jones Jr. Museum of Art. There’s no reversing the destruction, but hopefully the loss of this distinct piece of architecture will be a reminder to preserve what remains of Goff’s career — which was ultimately about rejecting any preconceived notions of what made a house and finding an organic way of modern living.

8.6.16

Poner el cuerpo. Llamamientos de arte y política en los años ochenta en América Latina. Museo de la Solidariedad Salvador Allende, hasta el 26 de junio.


Poner el cuerpo. Llamamientos de arte y política en los años ochenta en América Latina. from Museo de la Solidaridad (MSSA) on Vimeo.


Poner el cuerpo. Llamamientos de arte y política en los años ochenta en América Latina

Curador(es): Paulina Varas y Javiera Manzi

Artista(s): Elías Adasme, Agrupación de Plásticos Jóvenes (APJ), Anjeles Negros, Maris Bustamante, Gloria Camiruaga, Coordinador Cultural, Coordinador de Gremios del Arte, Guillermo Deisler, Luz Donoso, Paz Errázuriz, Gambas al Ajillo, Gang, Pedro Lemebel, Kena Lorenzini, Movimiento contra la tortura Sebastián Acevedo, Mujeres por la Vida, Museo Bailable, Luis Navarro, Hernán Parada, Solidarte, Janet Toro, Taller NN, Taller Sol, Unión Nacional por la Cultura, Sergio Zeballos, y otros.

Exhibición: sábado 09 de abril - domingo 26 de junio, 2016

Lugar: MSSA

La exposición Poner el cuerpo. Llamamientos de arte y política en los años ochenta en América Latina, retoma la pregunta por los múltiples cruces entre arte, activismos y luchas sociales en un periodo marcado por la violencia estatal y el auge de la doctrina neoliberal en los países de la región. En este escenario, poner el cuerpo supuso exponerse, e incluso sobre exponerse, frente a la censura, la pérdida, la desaparición. Fue un modo de reponer la ausencia de cuerpos individuales y la fragmentación de cuerpos colectivos, un medio desde donde se engendraron otras corporalidades y transgredieron fronteras nacionales. Es en estos movimientos de desobediencia y protesta, en los que todo cuerpo, al exponerse, exhibe también la trama de la que forma parte.

La presente muestra vuelve sobre las prácticas artísticas del periodo desde aquel trazado de cruces, roces y redes subterráneas que las hicieron posibles. Se enfatiza la presencia de grupos que asumieron la autoría como expresión colectiva, y la de coordinadoras que reunieron a artistas, trabajadores culturales, estudiantes, sindicatos, pobladores y agrupaciones de derechos humanos. De este modo se pretende dar lugar a una lectura crítica que busca ampliar el repertorio de quienes instituyeron los centros y periferias del periodo.

Durante la dictadura cívico militar en Chile, ‘llamamiento’ era el nombre con que fueron conocidas las declaraciones que buscaron agitar y convocar a la acción colectiva en la lucha contra el régimen imperante. Los llamamientos no fueron llamados discretos, muy por el contrario, su nombre escrito en presente continuo indica el carácter de un llamado que no se agota, que no triunfa, pero que al mismo tiempo no establece cierre, ni dimisión. Retomar los llamamientos como documentos de archivo y ejercicio de enunciación, nos permite iluminar las resonancias contemporáneas de su potencia crítica.

Las diferentes salas del Museo contendrán una serie de registros documentales y obras de artistas, relacionados con prácticas de activismo artístico, redes alternativas, corporalidades y disidencia sexual, así como escenas ‘under’ de los años ochenta a partir de fotografías, videos, audios, gráficas y publicaciones. En el acceso a la exposición se exhibirá el archivo de una de estas organizaciones político-culturales chilenas que en los años de mayor represión de la dictadura militar trazaron, pensaron y soñaron en cómo debía restaurarse la democracia en el ámbito de la cultura. Este archivo estará abierto a la consulta y se activará de diversas formas durante el período de la exposición.

Finalmente esta exposición es también una propuesta situada en Chile de Perder la Forma Humana. Una imagen sísmica de los años ochenta en América Latina curada por la Red de Conceptualismos del Sur, realizada en el Museo Centro de Arte Reina Sofía de Madrid en 2012 (itinerando al MALI, Lima, y MUNTREF, Buenos Aires). En el caso de la presente exposición se ha integrado una mayor participación de artistas nacionales y con ellos una relectura y expansión de los vínculos propuestos en la curaduría de Madrid.

Jorge Francisco Liernur. La construcción del discurso occidental sobre la vivienda en territorios tropicales. 15 de junio a las 16h30, Universidad de Chile



Seminario de historia de la arquitectura, la ciudad y el territorio

Jorge Francisco Liernur (Universidad Torcuato Di Tella-Conicet)

Mutaciones de Cáncer a Capricornio. La construcción del discurso occidental sobre la vivienda en territorios tropicales: de instrumento colonialista a factor de conflicto en la Guerra Fría

Miércoles 15 de junio, 16h30, sala C-16, Facultad de Arquitectura y Urbanismo, Universidad de Chile, Av. Portugal 84, Santiago.

En la quinta sesión del Seminario de historia de la arquitectura, la ciudad y el territorio contaremos con la presencia del profesor Jorge Francisco Liernur (Universidad Torcuato Di Tella-Conicet) quien presentará su trabajo titulado "Mutaciones de Cáncer a Capricornio. La construcción del discurso occidental sobre la vivienda en territorios tropicales: de instrumento colonialista a factor de conflicto en la Guerra Fría". Esta actividad se realizará miércoles 15 de junio a las 16h30 en la sala C-16 de la Facultad de Arquitectura y Urbanismo de la Universidad de Chile en Av. Portugal 84, Santiago.

Jorge Francisco Liernur es profesor emérito de la Escuela de Arquitectura y Estudios Urbanos de la Universidad Torcuato Di Tella e investigador principal del Conicet. Liernur es uno de los intelectuales más influyentes en el campo de la historia de la arquitectura y la ciudad en América Latina y es autor de una vasta obra entre la que se cuenta La casa y la multitud. Vivienda, política y cultura en la Argentina moderna, en colaboración con Anahí Ballent (2014), Arquitectura. En teoría (2010), La red austral. Obras y proyectos de Le Corbusier en la Argentina (1924-1965), en colaboración con Pablo Pschepiurca (2008) y Arquitectura en la Argentina del siglo XX: la construcción de la modernidad (2001), entre muchos otros trabajos. Liernur ha sido también co-curador de la reciente exposición "Latin America in construction: Architecture 1955-1980" realizada el año 2015 en el Museo de Arte Moderno de Nueva York, de cuyo catálogo es co-autor.

3.6.16

Presentan reedición de “Espacios Intermedios” de Glenda Kapstein

Vía UCN al Día.

Autoridades, docentes y amigos comentaron la obra de la arquitecta y académica.

La Escuela de Arquitectura de nuestra Universidad, presentó la reedición del libro “Espacios Intermedios” de la reconocida Arquitecta y académica de nuestra sa Casa de Estudios, Glenda Kapstein.

Su orientación medioambiental se delineó en 1988 con la publicación, la cual es parte de una investigación realizada por la arquitecta junto a un equipo de profesionales y alumnos ayudantes, la que en su primera edición fue patrocinada por la Universidad y la Fundación Andes.

La gestión de la reedición fue un sentido proyecto de Glenda Kapstein (Q.E.P.D.) el que no pudo concluir. Esta labor la tomó su hija Carla Monforte Kapstein, artista plástica, diseñadora, y diplomada en Gestión Cultural. En la ocasión, comentó que la iniciativa de una nueva publicación tuvo una buena acogida de Ediciones ARQ de la Escuela de Arquitectura de la PUC, logrando aportes del Fondo del Libro.

El lanzamiento del libro realizado en la Escuela de Arquitectura de nuestra Universidad con la asistencia de autoridades universitarias, académicos, estudiantes y amigos; fue un momento emotivo para la diseñadora, quien recordó el trabajo de su madre en el ámbito de la arquitectura. Explicó que los originales de la primera edición estaban hechos a mano y con máquina de escribir, por lo que armar nuevamente las páginas y su contenido implicó un trabajo difícil y laborioso. Todo aquello significó escanear, seleccionar fotografías y sintetizar textos e incluir anotaciones que dejó la autora, entre otros detalles, que dieron como resultado la obra.

HOMENAJE

El valor del trabajo y la motivación por la arquitectura fueron los aspectos destacados por el Director de la Escuela de Arquitectura, Dr. Carlos Miranda, quien manifestó que presentar la publicación es una oprtunidad para hacer un homenaje a la destacada porfesional.

En tanto, el Director General de Vinculación con el Medio, Dr. Sergio Alfaro, comentó que de alguna manera en esa unidad académica son depositarios de la visión de la profesora, su obra en el ámbito del habitar el Desierto de Atacama y su relación con la arquitectura.

Puso en contexto el libro el Secretario Académico de la Escuela de Arquitectura, Dr. Claudio Galeno, comentando la trayectoria de la arquitecta en el extranjero y la labor desarrollada en Antofagasta, sus obras, reconocimientos y distinciones.

Al académico Dr. Claudio Ostria, le correspondió colaborar en la primera edición del libro, fue así que recordó momentos compartidos con la profesora, destacando su personalidad y compromiso con la enseñanza de la arquitectura, su calidad humana y fortaleza en los momentos que le tocó vivir antes de su partida. Su amiga, Patria Bennett, también se refirió a la obra y al trabajo de la autora.

ARQUITECTA

Graduada de la Escuela de Arquitectura de la U. de Chile, Glenda Kapstein, completó su formación en Madrid, España. Regresó a Chile en 1979, donde trabajó en Sernatur de San Antonio y a mediados de 1980 se trasladó a Antofagasta, donde fue Directora Regional de Turismo, y en 1982 inició su carrera académica y de investigación comprometida con el Desierto de Atacama, en la Escuela de Arquitectura de la UCN.

En parte de su obra y trayectoria destacan la Casa de Retiro en Antofagasta, 1989-1991; el Pabellón de Codelco en Exponor en 1995; la Galería Solar de la Casa G, en El Quisco, 1997-2003; y la ampliación de la Escuela de Arquitectura de la UCN. En el año 2003, recibió el Premio Internacional Passive and Low Energy Architecture, por una trayectoria con una permanente preocupación sobre la arquitectura y el medio ambiente.

Encuentro Latinoamericano: El Patrimonio Cultural del Bicentenario. 200 años de Territorio, Ciudad y Arquitectura, 24, 25 y 26 de agosto, San Miguel de Tucumán, Argentina

Vía Icomos.

El Patrimonio Cultural del Bicentenario

ICOMOS Argentina junto al Instituto de Historia y Patrimonio FAU-UNT y la Facultad de Arquitectura y Urbanismo de la Universidad Nacional de Tucumán, tienen el agrado de invitarlo a participar del Encuentro Latinoamericano: El Patrimonio Cultural del Bicentenario. 200 años de Territorio, Ciudad y Arquitectura que se realizará los días 24, 25 y 26 de agosto en San Miguel de Tucumán, Argentina.

PRESENTACIÓN

La conmemoración de los 200 años de la declaración de la Independencia en la Argentina nos ofrece la posibilidad de reflexionar sobre nuestro devenir histórico y social en función de las manifestaciones culturales, obras arquitectónicas y urbanísticas surgidas en la región desde 1816 a la actualidad.

En este sentido el patrimonio cultural se ha configurado como uno de los rasgos identitarios esenciales en la construcción de la Nación. Tan trascendente hito nos brinda la posibilidad de ser protagonistas de un momento histórico que nos confronta con nuestro pasado, nuestro patrimonio en el presente y el futuro del legado histórico.

De esta manera, la realización de este Encuentro Latinoamericano propone posicionarnos en el segundo de los Bicentenarios como una oportunidad de reflexión que apunte a la salvaguarda de nuestro patrimonio, entendido como rasgo esencial de la memoria e identidad de nuestra sociedad, al tiempo que permita poner en crisis el sistema de legitimación desde el patrimonio edificado propiciado por la historiografía oficial.

El patrimonio es una construcción social, por lo tanto es variable de acuerdo a criterios que se van renovando o intereses que se fueron generando a lo largo de la historia, es el resultado de la sociedad en un determinado tiempo y espacio. La valoración del mismo es un concepto relativo que implica una posición privilegiada del que lo impone y que remite procesos de visibilización e invisibilización de prácticas y saberes culturales.

A la vez, este ámbito de encuentro y reflexión pretende confrontar los procesos de construcción de la nacionalidad y su materialización en los distintos países de la región. En este sentido la consideración del acervo patrimonial del país trasciende sus fronteras para encontrar nexos, puntos de encuentro y también divergencias y ocultamientos en el patrimonio latinoamericano desarrollado a lo largo de estos doscientos años.

Por ello ICOMOS Argentina junto al Instituto de Historia y Patrimonio de la Facultad de Arquitectura y Urbanismo de la Universidad Nacional de Tucumán concretan este encuentro en el lugar donde precisamente se celebró el Congreso que hace 200 años declarara la Independencia Argentina, convocando a especialistas, investigadores y docentes, equipos técnicos de instituciones gubernamentales y no gubernamentales, estudiantes y público en general que valoran e impulsan la protección efectiva del patrimonio cultural, considerando este momento histórico como una oportunidad única para convertirnos en protagonistas activos en la definición de nuestra identidad nacional y latinoamericana.
OBJETIVO GENERAL

El objetivo principal de este Encuentro es dar cuenta del patrimonio cultural que se ha producido en el país y en la región en estos doscientos desde la declaración de la independencia en 1816. En este sentido se intenta un acercamiento al patrimonio desde el objeto mismo a ser conservado pero haciendo hincapié en las múltiples dimensiones que conlleva dicha protección incluyendo su uso social por parte de la comunidad. Así se considerarán las acciones de investigación, metodologías, inventarios, catalogación; la historiografía, recopilaciones, publicaciones; las campañas de concientización; la educación, las acciones de transferencia; las estrategias de salvaguarda, la gestión desde los diferentes actores involucrados; la relación turismo y desarrollo sustentable; la conservación e intervención; el estudio de casos; legislaciones, planes de manejo, rutas e itinerarios culturales, etc. Esto aportará una doble riqueza al encuentro ya que permitirá una puesta en común de gran parte del patrimonio existente en el país y la región a la vez que dará cuenta del estado de la cuestión patrimonial como quehacer profesional.
OBJETIVOS PARTICULARES

Generar espacios de discusión de experiencias relacionadas con el patrimonio cultural material e inmaterial en tres escalas de abordaje: territorio; ciudad y arquitectura.
Intercambiar experiencias sobre la gestión del patrimonio cultural: políticas públicas; turismo sustentable y patrimonio; participación ciudadana en la gestión del patrimonio; desarrollo sustentable; la gestión desde los ámbitos académicos, educación, transferencia, difusión, experiencias compartidas en la gestión.
Generar espacios y propuestas de discusión de experiencias relacionadas con la conservación del patrimonio en sus aspectos metodológicos, técnicos, conservación preventiva, restauración, rehabilitación, etc.
Intercambiar diferentes enfoques teóricos y metodológicos para el abordaje de la relación entre los diferentes tipos de bienes culturales, la conservación de la memoria histórica y la construcción de imaginarios sobre el patrimonio.
Intercambiar experiencias en materia de legislación; códigos normativos, mecanismos jurídicos, etc.

EJES TEMÁTICOS

Se han establecido tres escalas de consideración:
TERRITORIO

Esta dimensión pretende atender abordajes amplios sobre el patrimonio más allá del objeto aislado y del conjunto, llegando a su consideración territorial: los casos vinculados a los paisajes culturales, rutas e itinerarios culturales, etc.
CIUDAD

Al hablar de la ciudad se intenta considerar al hecho urbano en su complejidad patrimonial: centros históricos, espacio público, conjuntos, hitos, sectores, fragmentos: ciudades, calles, parques, plazas y jardines. Fiestas, celebraciones, conmemoraciones y rituales en el espacio público.
ARQUITECTURA

Se aborda a la obra aislada, el conjunto o las series patrimoniales referidas a: Patrimonio del trabajo, las comunicaciones, la industria y el comercio; Patrimonio institucional (educación, gobierno, salud, culto, etc.); Patrimonio y espacios de las artes, la cultura y el entretenimiento (cines, teatros, museos, bibliotecas, etc.); Patrimonio y educación (centros educativos, escuelas, universidades, etc.); Patrimonio doméstico (arquitectura residencial).



Los trabajos deberán estar enmarcados en los siguientes ejes propuestos que podrán abordar uno o más de los temas que lo integran:
Eje 1-Memoria e Identidad

Los estudios historiográficos como acción de base para la conservación y el desarrollo del patrimonio: contribuciones teóricas, abordajes metodológicos y fuentes.
El patrimonio inmaterial como soporte de la identidad. Rituales, símbolos y fiestas; Testimonios orales y memorias.
Imágenes y representaciones del patrimonio a través de la literatura, la prensa, la iconografía.
Archivos y otros reservorios documentales. Los Museos.

Eje 2- Conservación

Metodología de abordaje, principios teóricos. Criterios de intervención: conservación preventiva y rehabilitación.
Tecnologías tradicionales o de última generación.
Registros, inventarios, divulgación, museología.
Proyectos y Realizaciones.

Eje 3-Gestión y Normativa

Políticas públicas, programas y proyectos, iniciativas de preservación, financiamientos, incentivos fiscales.
Planes de manejo y ordenamiento, planos directores urbanos.
Instituciones no gubernamentales.
La gestión desde los ámbitos académicos. Centros de Investigación y redes.
Participación ciudadana.
Políticas de Turismo cultural y desarrollo.
Difusión. Nuevas tecnologías aplicadas a la documentación, información y divulgación del patrimonio cultural.
Aspectos legales y normativos.

METODOLOGÍA

El Encuentro será un espacio participativo en el cual se desarrollarán conferencias por parte de personalidades académicas invitadas especialmente, cuyos aportes servirán de disparadores.

Simultáneamente se realizará la participación de profesionales que posibilite incrementar el conocimiento de la temática a la vez que generar análisis y debates, e intercambiar experiencias. Para ello, se presentarán ponencias individuales y/o grupales que deberán ajustarse a los ejes temáticos propuestos y a los objetivos del encuentro. Los trabajos presentados en forma grupal no deben superar la cantidad de 3 (tres) autores.

Cada expositor dispondrá de 15 minutos para exponer los aspectos más salientes y las conclusiones de su trabajo. Se realizarán luego los comentarios y a continuación los participantes podrán solicitar explicaciones o ampliaciones sobre lo expuesto, con intervenciones de no más de 10 minutos de duración.

Todos los trabajos presentados por sus autores/as serán editados en soporte digital y distribuidos entre los participantes luego de finalizado el Encuentro. No se incluirán aquellos trabajos cuyos autores no participen en el Encuentro.

Los ponentes serán evaluados por un Comité Científico designado por la el Comité Organizador.
FORMAS DE PARTICIPACIÓN

Por el carácter participativo de este Encuentro, los interesados pueden intervenir de la siguiente manera:

Presentando una ponencia relacionada a la temática basada en una conceptualización teórica, en experiencias de gestión o en proyectos de gestión.
Como asistente a las actividades programadas.

En cualquier forma de participación, los interesados deberán completar una ficha de inscripción y concretar el pago.
FECHAS IMPORTANTES E INSCRIPCIONES

Envío de resúmenes: fecha límite. 29 de abril de 2016

Aceptación de resúmenes: 22 de mayo de 2016

Envió de ponencias: fecha límite 8 de julio de 2016
CARACTERÍSTICAS ABSTRACTS Y PONENCIAS
RESÚMENES

El texto deberá ajustarse a las siguientes pautas:

Título del trabajo en letra Times New Roman cuerpo 14 negrita, alineación central.

A continuación, se consignarán los siguientes datos:

Nombre y apellido del autor/a o equipo de no más de tres autores

Organismo o institución a la que pertenece (si corresponde)

Texto en formato A4, tipografía Times New Roman cuerpo 12, interlineado 1,5.

Extensión máxima 300 palabras.


PONENCIAS

El texto deberá ajustarse a las siguientes pautas:

Título del trabajo en letra Times New Roman cuerpo 14 negrita, alineación central.

A continuación, se consignarán los siguientes datos siguiendo la alineación central:

Nombre y apellido del autor

Organismo o institución a la que pertenece (si corresponde)

Texto en formato A4, tipografía Times New Roman cuerpo 12, interlineado 1,5.

Extensión: mínima 5 y máxima 8 páginas. En ningún caso superar las 4 mil palabras.

Márgenes: superior e izquierdo 3,5cm; inferior y derecho 2,5cm.

Imágenes; hasta 4 por trabajo, con una definición mínima de 300dpi e identificadas con epígrafes y fuente. Deben venir intercaladas en el texto.

Bibliografía utilizada al final del texto.

Citas bibliográficas a pie de página tendrán numeración consecutiva e irán en letra Times New Román, cuerpo 10.


ORGANIZADORES

ICOMOS Argentina

Instituto de Historia y Patrimonio, Facultad de Arquitectura y Urbanismo, Universidad Nacional de Tucumán.