30.10.16

Mujeres antofagastinas: Señorita Elsa Masriera. Foto Gómez.


Recorte de periódico no identificado, Foto Gómez, alrededor de 1928.

En el libro "Antofagasta de Película: historia de los orígenes de un cine regional" de Jara, Mülchi y Zuanic, se refieren a Elsa Masriera Barrie:

"(...) nace en el Perú [1912], pero su familia, se traslada a Antofagasta. De padre músico [Rosendo Masriera] y madre, actriz, desde muy joven se relaciona con el medio artístico. Así se convierte en violinista, reina de la primavera, y actriz del cine mudo antofagastino. En 1927, debuta en 'Madre sin saberlo'. Con el advenimiento del sonido busca desarrollarse como cantante y adopta el nombre de Elsa Becksey. Luego es conocida como Elsa del Campillo. Viaja a Argentina para proseguir su carrera cinematográfica y musical, y entre los años 40 y 50 participa a lo menos e seis películas. A Chile, retorna para filmar 'Las apariencias engañan' (1940). Regresa a Argentina, y después nuevamente a Chile para participar en 'Tormenta del alma' (1946) y 'El último guapo' (1947). Sus incursiones son tanto en el teatro, la radio y el cine. Los últimos años de su vida los pasa en Argentina." (Jara, Mülchi y Zuanic, 2008: 78)

El CCCB investiga el poder de la arquitectura como motor de deseo sexual



Vía La Vanguardia.

Hasta el 19 de marzo

La muestra '1.000 m2 de deseo. Arquitectura y sexualidad' evidencia que los espacios propuestos para el placer se imaginan desde una fantasía masculina

El Centre de Cultura Contemporània de Barcelona (CCCB) investiga el poder de la arquitectura como motor de deseo sexual con la proyección de espacios para el sexo desde el siglo XVIII hasta la actualidad en una exposición "densa, en cuanto a pensamiento, pero juguetona", ha explicado el director del centro, Vicenç Villatoro, en rueda de prensa.

En la presentación '1.000 m2 de deseo. Arquitectura y sexualidad', el director ha remarcado que el recorrido ayuda a explicar el presentE, las personas y las sociedades: "No se puede explicar la contemporaneidad sin hablar de sexo y sin esta mirada".

La jefa de exposiciones del CCCB y comisaria, Rosa Ferré, ha destacado que la exposición investiga la proyección, investigación e imaginación de los espacios para el sexo en la sociedad occidental a través de 250 piezas, entre dibujos y maquetas de arquitectura, instalaciones, artísticas, audiovisuales y libros.

No se puede explicar la contemporaneidad sin hablar de sexo y sin esta mirada
Vicenç Villatoro

Director CCCB

El recorrido, también comisariado por Adelaïde de Caters y visitable hasta el 19 de marzo, explora el poder que ejercen los espacios como motor del deseo y muestra cómo la arquitectura ha contribuido al control de los comportamientos y a la creación de los estereotipos de género en la sociedad patriarcal actual, ha dicho Ferré.

La exposición evidencia como la práctica de la arquitectura ha estado dominada hasta muy recientemente por hombres y que, en consecuencia, los espacios propuestos para el placer se imaginan desde un deseo y una fantasía masculinos.

La propuesta, que no sigue una línea cronológica, pivota sobre tres ejes temáticos --'Utopías sexuales, 'Refugios libertinos' y 'Sexografías'-- y parte del siglo XVIII porque en este siglo nació el "concepto de intimidad", que en los siglos posteriores se convirtió en un espectáculo.

Las utopías sexuales del siglo XVIII de Claude-Nicolas Ledoux, Restif de La Bretonne y Charles Fourier abren el recorrido con sus propuestas radicales con proyectos radicales como el templo del placer de Ledoux, y los espacios para orgías eróticas y gastronómicas de Fourier.

En este apartado, se puede ver el gabinete Sade que investiga como el marqués construyó su utopía narrativa del exceso desde su pasión por la arquitectura y las artes escénicas.

También reivindica el trabajo del visionario arquitecto húngaro Nicolas Schöffer, que en los años 60 proyectó una ciudad utópica para la que diseñó un Centro de Entretenimientos Sexuales, representados en una instalación de gran formato que reproduce este espacio.

En el capítulo de 'Refugios libertinos', explora el poder que los espacios ejercen como motor del deseo y analiza cómo son los refugios para el placer, desde las 'petites maisons' de la aristocracia francesa del siglo XVIII, hasta los apartamentos para solteros propuestos por 'Playboy'.

‘Playboy’ y la arquitectura

De hecho, la exposición le dedica un capítulo entero a 'Playboy', comisariado por Beatriz Colomina, quien ha reivindicado el papel de la revista en la difusión de la arquitectura moderna de Frank Lloyd Wright y Mies van der Rohe en un momento en que las revistas del sector eran muy convencionales y clásicas.

"La revista hizo aceptable que los hombres se interesaran por la arquitectura y el diseño", además de cuestiones de estilo de vida, ropa y diseño, ha subrayado Colomina, que ha admitido que la publicación trata como un objeto a mujeres, pero también a hombres.

El ámbito 'Sexografías' ofrece un "mapa de las pasiones contemporáneas" a través de piezas de arquitectos y artistas como Bernard Tschumi, ecoLogicStudio, Danli Wang, Pol Esteve y Marc Navarro y descubre espacios públicos codificados para el sexo, como parques, calles y baños públicos.

27.10.16

Donan una gran colección de arte latinoamericano al MoMA

Vía El Clarín, 17/10/16.

Donan una gran colección de arte latinoamericano al MoMA

Son 102 obras pertenecientes a Patricia Cisneros

De origen venezolano, la benefactora crea además un centro de estudios críticos en el gran museo neoyorquino.

Por Ana Maria Battistozzi


Alejandro Xul Solar, Pan Game and Marionette I Ching, c. 1945. Gift of Patricia Phelps de Cisneros, through the Latin American and Caribbean Fund, in honor of Agnes Gund.

Con la imagen una obra del argentino Raúl Lozza proyectada a sus espaldas, el director del Museo de Arte Moderno de Nueva York (MoMA), Glenn Lowry, subió al estrado del auditorio ayer por la mañana para una presentación de alto impacto para el arte y latinoamericano. “Tengo el placer de anunciarles –dijo a los presentes y a muchos que lo seguían por streaming desde distintos países de la región– la donación de más de cien piezas de arte moderno latinoamericano de la Colección Patricia Phelps de Cisneros. El aplauso no se hizo esperar aunque aún faltaba otro anuncio: la creación y radicación del Instituto de Investigación Patricia Phelps de Cisneros para el Arte Latinoamericano que se radicará en el MoMA, dedicado al estudio e interpretación del arte moderno y contemporáneo de la región.

Patricia Phelps de Cisneros es considerada una de las figuras que mayor contribución ha realizado al conocimiento y visibilidad del arte latinoamericano en los Estados Unidos en las últimas décadas.

La donación de su familia abarca un conjunto de 102 piezas –pinturas, esculturas y obras en papel– realizadas entre las décadas del 40 y 90 del siglo pasado. El aporte de esta colección es fundamental por la importancia que le concedió desde su formación a la herencia constructivista y la tradición geométrica, al arte concreto, neoconcreto y cinético de Brasil, el Río de la Plata y Venezuela. Entre los artistas incluidos se destacan los brasileños Lygia Clark, Hélio Oiticica, Lygia Pape; los venezolanos Jesús Rafael Soto, Gego y Alejandro Otero. Entre los argentinos, Alfredo Hlito, Raúl Lozza, Tomás Maldonado, Juan Melé, Juan Molenberg, Lidy Prati y Xul Solar. Muchos de estos artistas ingresan al patrimonio del MoMA por primera vez y por esta vía lo que da cuenta de la relevancia y el prestigio que reviste esta colección. Se trata, según se la presentó ayer, de una donación sin precedentes en la historia del arte latinoamericano, que contribuye a su integración a la narrativa del arte moderno de un modo ampliado.

Parte del conjunto que ingresa ahora al MoMA integró la muestra The Geometry of Hope, que en 2007 partió de una investigación que se llevó a cabo y se exhibió en ámbitos académicos como el Blanton Museum de la Universidad de Austin, Texas, y la Grey Gallery de la Universidad de Nueva York. Con esta incorporación se amplía aun más la estrecha visión de la modernidad latinoamericana que por largo tiempo mantuvo el MoMA, dentro de las acotadas adquisiciones que realizó el primer director, Alfred Barr Jr., y que estaba limitada a la relación con México –particularmente los muralistas– y algunas figuras del Caribe, como Wilfredo Lam. Este proceso de ampliación de horizontes tiene otro interesante antecedente que casualmente también se vio en el MoMA en 2007. Se trata de la muestra que curó Luis Pérez Oramas, que se llamó Nuevas perspectivas del Arte Latinoamericano 1930- 2006 e incluía adquisiciones recientes, muchas propuestas desde el departamento de dibujo de la institución.

Actualmente, la colección del Museo de Arte Moderno de Nueva York, incluye más de 5.000 obras de artistas latinoamericanos. A partir de junio del próximo año, según se dijo ayer, estas actividades permitirán poner en valor el arte de la región a través de una de las mayores plataformas para el arte moderno a nivel global.

De la ilusión al rechazo: la fallida relación de Le Corbusier con América del Sur. 4 de noviembre - 22 de enero de 2017 / MAC Parque Forestal

Vía La Tercera.

De la ilusión al rechazo: la fallida relación de Le Corbusier con América del Sur

Por Denisse Espinoza A.



El padre de la arquitectura moderna intentó hacer varios proyectos en la región, incluidas dos residencias en Santiago y un nuevo plan urbano para Chillán, pero lo único que logró fue la casa Curutchet en La Plata, Argentina. Una muestra en el MAC reúne, desde el 4 de noviembre, planos y dibujos inéditos de 12 de estas ideas que fueron un dolor de cabeza para el francés.

Venía para “hacerse la América”. Tal como lo pensaron los primeros navegantes y exploradores que buscaban nuevos rumbos y riquezas, el arquitecto nacido con el nombre de Charles-Edouard Jeanneret (1885-1965), pero conocido mundialmente como Le Corbusier, veía en el joven continente americano un potencial refugio para sus ideas modernistas, las que aún no habían logrado pleno desarrollo en Europa. Era 1929 y aunque el francés había construido poco, sus diseños ya revolucionaban y sorprendían a la escena arquitectónica mundial.

Ese año hizo su primer viaje al continente: dictó un ciclo de conferencias en Buenos Aires, visitó Río de Janeiro, Asunción y Montevideo. Entre 1929 y 1962 volvió varias veces, 11 para ser exactos, viajó a Bogotá donde proyectó un plan urbano y para Brasil diseñó el edificio del Ministerio de Educación y la Ciudad Universitaria de Río de Janeiro. Incluso hizo proyectos para países que nunca visitó, como Chile, donde proyectó dos casas, una en Zapallar para el diplomático Matías Errázuriz y un taller en Santiago Poniente para el arquitecto Roberto Dávila, quien trabajó para él en París, en 1932. De todo eso, nada se hizo; a excepción de la casa para el doctor Pedro Curutchet en La Plata, Argentina, que terminó siendo su única construcción en América Latina.

La relación fallida del arquitecto suizo, nacionalizado francés, con los países de la región es profundizada en la exposición Le Corbusier y el sur de América, que reúne planos, dibujos y otros documentos inéditos -la mayoría traídos desde la Fundación Le Corbusier en París- de 12 proyectos diseñados por el autor de la Villa Savoye y nunca realizados.

La muestra es organizada por la Facultad de Arquitectura y Urbanismo de la U. de Chile y curada por el arquitecto Maximiano Atria. “Le Corbusier llegó con la idea de encontrar un continente prometido, una región joven que estaría abierta a recibir la arquitectura moderna, a diferencia de Europa, que era un continente cazado por su pasado. Nada salió como él quería. Creo que la gran razón para la mayoría de los proyectos fue la inestabilidad política, el cambio de autoridades que echaron por la borda proyectos completos o pedían cambios una y otra vez. Al final fue en Chandigarh, India, el lugar donde hizo realidad su imaginario urbano”, cuenta el curador.

Más allá de los proyectos, Le Corbusier entabló vínculos con varios arquitectos latinoamericanos a quienes recibía en su oficina para que trabajaran entre tres y seis meses. Aunque nadie recibía paga, les bastaba con estar bajo las órdenes del arquitecto más influyente del mundo. Entre ellos hubo cuatro chilenos: Roberto Dávila en 1932, Roberto Matta en 1938, Emilio Duhart en 1952 y Guillermo Jullian de 1959 a 1965, quien se convirtió en el brazo derecho de Le Corbusier y heredaría su taller.

“El (Jullian) incluso fue jefe de su oficina en Venecia, cuando trabajaban en el diseño del hospital de esa ciudad. Jullian decía que Le Corbusier era una bestia, era muy duro y difícil, pero al mismo tiempo era un tipo muy generoso y sensible, y de hecho con él estableció una relación que no la tuvo con ningún otro colaborador”, cuenta Atria, quien trabajó con Guillermo Jullian cuando éste regresó a Chile en 2004, luego de una larga carrera académica en EEUU.

Buscado y rechazado

Entre los 12 proyectos que están en la muestra destacan la casa para la escritora argentina Victoria Ocampo, quien lo invitó a Buenos Aires en 1929, pero que terminó construyendo su residencia con los planos de otro arquitecto más tradicional; el Plan Director de Bogotá, ciudad a la que Le Corbusier viajó cinco veces a ver detalles y hacer cambios sin lograr frutos; una capilla funeraria en Venezuela que -se piensa- fue cancelada por temas políticos, debido a que era en homenaje al ex militar asesinado Carlos Delgado-Chalbaud; y la embajada de Francia en Brasilia, que estuvo a punto de ser desarrollada pero justo Le Corbusier falleció. “El proyecto lo heredó Jullian, quien se negó a hacer modificaciones al diseño de Le Corbusier. A cambio las autoridades brasileñas le pidieron que hiciera sus propios planos; esos sí se construyeron”, cuenta Atria.

La muestra contará además con ocho maquetas abstractas de algunos rasgos fundamentales de los proyectos, y tres videos: un documental sobre el viaje del 29 que se hizo en Argentina; uno con cápsulas de la arquitectura chilena inspirada en la obra de Le Corbusier, como la Villa Portales o la Cepal, obra de Emilio Duhart, y un video de 2005 de la Fundación Le Corbusier, con grabaciones hechas por él mismo con su cámara Super 8 de su viaje a Río de Janeiro en 1936. También se exhibirán algunas de las libretas de viaje del arquitecto, donde dibujaba los paisajes y personas que veía.

“Si bien no existe nada en común entre los diseños para América, sí hay una correlación con las obras que estaba haciendo en esas mismas épocas. No eran pensados como proyectos exóticos sino como parte de toda su obra. La Casa Ocampo es similar a otras casas hechas en Europa, y el taller de Dávila toma cosas de otro proyecto en Argelia. El siempre partía de su catálogo y reciclaba sus propios elementos típico. Además, él se reinventaba cada 10 años; lo que hizo en los 30 es totalmente diferente a lo que hizo en los 40 y los 50”, señala el curador.

“Pienso que él era consciente de que era objeto de conflicto permanente, y de alguna forma buscaba ganarse esa imagen del arquitecto incomprendido, que lucha contra todo. Su libro de cabecera era Don Quijote. Le gustaba presentarse como ‘el arquitecto al que todos rechazan’, aunque al mismo tiempo, todos lo buscaban porque era y sigue siendo el arquitecto más importante del siglo XX”.

26.10.16

Ideología animada: las disputas arquitectónicas de EEUU y la Unión Soviética

Vía La Tercera.

Ideología animada: chilenos exhiben las disputas arquitectónicas de EEUU y la Unión Soviética

El acero versus el hormigón armado no sólo representaron sistemas de construcción diferentes para ambas potencias. También fueron símbolos de sus ideologías, que a su vez se reflejaron en sus dibujos animados. Los ganadores del León de Plata en la Bienal de Arquitectura de Venecia de 2014, exhiben ahora la investigación en la Trienal de Lisboa.

Autor: Denisse Espinoza



Popeye y Brutus colgados en los lados opuestos de una viga de acero a metros del suelo; Bugs Bunny camina sonámbulo sobre otra viga sin caer nunca, y Mickey Mouse corre a toda velocidad con una carretilla llena de ladrillos, cruzando de viga y viga, sin perder la sonrisa del rostro. En los años 30, Estados Unidos estaba orgulloso del sistema constructivo de sus primeros rascacielos, y así lo reflejaba en sus películas y dibujos animados. Mientras, la Unión Soviética exhibía sus efectivos paneles de hormigón en caricaturas similares, donde los personajes bailan y se trasladan sobre las inmensas estructuras.

El contraste ideológico, cultural y arquitectónico de ambos países enfrentados durante la Guerra Fría, se exhibe ahora en Coreografías: la exhibición del diseñador Hugo Palmarola y el arquitecto Pedro Alonso para la 4° Trienal de Arquitectura de Lisboa, que se desarrolla hasta el 11 de diciembre.

Ambos fueron reconocidos en 2014 con el León de Plata en la Bienal de Arquitectura de Venecia, gracias a una investigación sobre la KPD, una fábrica soviética de paneles de hormigón instalada en Chile durante la Unidad Popular. Ahora se embarcan en esta investigación que ya ha sido destacada por el diario británico The Guardian y la revista especializada Dezeen. La muestra consiste en dos videos proyectados simultáneamente y en loop, de caricaturas estadounidenses y soviéticas, donde se muestra la construcción con vigas de acero versus los paneles de hormigón armado.

“Para cada una de estas potencias fue muy importante enaltecer sus sistemas constructivos, que a su vez representan la fe de cada uno en los cimientos de su ideología. Los personajes animados hacen piruetas, bailan, caminan dormidos y se persiguen sin nunca caer. Hay una fe ciega de EEUU y la Unión Soviética en sus propias infraestructuras. Los EEUU pone en valor los rascacielos y su desarrollo del capitalismo, mientras la Unión Soviética simboliza el igualitarismo, con una estética cruda que retoma los principios del constructivismo”, explica Hugo Palmarola.

En el caso de EEUU, este tipo de comedias que utilizaba vigas de acero como elemento de humor partió en 1921, con la cinta Never Weaken del comediante Harold Lloyd, y luego fue replicada por los estudios animados para episodios de Mickey Mouse, Popeye, Porky, Mr. Magoo, Bugs Bunny, Tom and Jerry, etc.
La Unión Soviética, en tanto, empezó a utilizarlos a partir de la película Cheryomushki (1963), basada en una opereta de Shostakóvich, que hacía una apología del hormigón armado, heredada luego por otras animaciones desconocidas en Occidente, como The Story of a crime y I’ll get you. “En la medida que estas animaciones estaban dirigidas a un público general, y a los niños, estos sitios de construcción con coreografías de vigas y paneles eran también campos de batalla en la construcción de una cierta conciencia social hacia la política y la educación”, explican los chilenos.

Chilenos destacados

El evento portugués ha ganado atención al desplegarse por toda la ciudad en seis sedes diferentes, además de contar con importantes arquitectos como David Chiperfield y Rem Koolhaas en el mismo apartado en que lo hacen Palmarola y Alonso. Además de ellos, la chilena Cecilia Puga participa como jurado del Premio a la Trayectoria, otorgado a la oficina francesa Lacanton & Vassal; mientras que el Premio Debut, para oficinas emergentes, fue para la chilena UMWELT, de los arquitectos Arturo Scheidegger (1983) e Ignacio García Partarrieu (1984), ambos de la U. Católica. Tras competir contra 145 participantes, los chilenos se impusieron en el galardón -dotado de 5 mil euros- por “un corpus de obra que combina proyectos construidos con trabajos de investigación altamente relevantes (…) en los que el pensamiento y el rigor de la construcción impulsa la renovación del imaginario formal de la arquitectura”, señaló el jurado.

Abren la memoria de Juan Acha, pionero del arte latino

Vía Excelsior.

Para conmemorar el centenario de su natalicio, finalmente se tendrá acceso a los documentos que donó la familia del crítico peruano a la UNAM

Por Sonia Ávila


Foto: Sunny Quintero

CIUDAD DE MÉXICO.

Las bases de la teoría y la crítica del arte en América Latina, contenidas en un espacio: Proyecto Juan Acha. Es el archivo y la biblioteca del crítico peruano que documentan la práctica artística contemporánea de la segunda mitad del siglo XX. Mil 166 libros, mil 261 publicaciones periódicas, 40 tesis, tres mil 100 documentos de exposiciones, mil 350 fotografías y 250 folletos. Material que se abre a consulta pública en el Centro Cultural Universitario Tlatelolco en el centenario del nacimiento de uno de los principales teóricos del arte latinoamericano.

Luego de un proceso de catalogación y conservación, y de asignar personal especializado, el archivo estará disponible para consulta general. Aunque Ander Azpiri Landa, subdirector académico del CCU Tlatelolco, advirtió: “No es una biblioteca general. Es un archivo especializado”. Se refiere a que el material responde al estudio que por más de cuatro décadas realizó Juan Acha (Sullana, Perú, 1916-Cd. de México, 1995) para teorizar sobre el arte en Latinoamérica. Los ejes temáticos tienen que ver con la circulación de la plástica: economía, cultura, medios de producción y distribución.

En sus estantes, que ocupan un espacio en la Unidad de Vinculación Artística del CCU, se conservan libros sobre filosofía, historia del arte, teoría sobre estética; catálogos y folletos de exposiciones de entre 1960 1980; publicaciones periódicas y material visual con el que Acha impartía clases en la UNAM y el INBA. “Si la gente piensa que es una biblioteca de temas básicos está mal. Es muy especializada para investigaciones puntuales de académicos”, añadió José Espitia, jefe del archivo.

Del acervo bibliográfico se pueden encontrar títulos como Del arte objetual al arte de concepto: Las artes plásticas desde 1960 de Simón Marchán, Ensayos de crítica cultural, 1964-1981 reunidos por Alfredo Chacón, Figuración y no figuración en el arte de Eduardo González Lanuza. En las publicaciones periódicas la revista LinkCritica de arte, editada en Río de Janeiro; una memoria del Simposio Da Bienal Latino Americana De Sao Paulo (1978) y el registro de las Jornadas de la Crítica en Argentina.

Además correspondencia con artistas y funcionarios culturales, fotografías de obras, libros de artistas y carteles de exposiciones complementan un acervo que registra el desarrollo conceptual del arte. Sobre todo entre las décadas 60 a 90, aunque Acha conservó curiosidades como libros de 1800. También se resguarda material de Perú. Ese que da cuenta de su labor en la promoción cultural, la difusión, el activismo social, la enseñanza e incluso en el periodismo cultural como sus colaboraciones en el suplemento cultural Diorama, de Excélsior.

En tiempos recientes se están haciendo nuevas revisiones sobre las aportaciones del arte desde Latinoamérica entre los 50 y 80, pero no es fenómeno único de México sino un fenómeno de revisión en toda Latinoamérica, y en ese contexto Acha es uno de los teóricos más importantes, más consultados. Así entendemos cómo su archivo es especializado, pues las aportaciones tienen que ver con la práctica profesional del arte, de los museos, del mercado de la producción”, apuntó Azpiri. Espera que con la apertura oficial, las consultas se multipliquen.

En textos de Acha se leen los primeros acercamientos a conceptos como curaduría, arte conceptual, obras en proceso, artista de archivo, arte popular o hapenning. Términos que, si bien hoy se usan de manera cotidiana, el crítico peruano fue de los primeros en teorizar. Sus reflexiones pioneras entorno a la educación artística y el sistema productivo de las artes sentaron las bases del arte contemporáneo.
Donación a la UNAM

En busca de un espacio para conservar y difundir el material, Mahia Biblos Boskües, esposa del teórico, donó los cerca de 13 mil objetos a la UNAM. Luego de su estancia en la Academia de San Carlos sin ningún éxito, el material llegó en 2009 a Tlatelolco. Y si bien se inició un proceso de catalogación para atender consultas públicas, en realidad la biblioteca recibía un público compacto.

No se puede abrir a la investigación un archivo que está en bruto, tiene que haber procesos y estábamos en eso. Siempre ha habido personal para atender al público. Ahora de fijo están tres personas y lo que hicimos en estos últimos tres años fue una catalogación pero no sólo en cuestión técnica sino conceptual”, abundó el coordinador.

Se trata de asignar una identificación al material además de convertirlo en un motor para buscar información desde el sistema de bibliotecas de la UNAM. El acervo de libros está catalogado al cien por ciento, y se trabaja en terminar los catálogos de exposiciones, literatura gris y correspondencia. Material que también se puede consultar con previa cita.

El siguiente paso es la digitalización, y ya está en planes como parte de un proyecto en el Seminario del Instituto de Investigaciones Estéticas de la UNAM. “La digitalización implica cuestiones de catalogación de archivo digitales y eso conceptualmente es un debate”, acotó al señalar que el Proyecto Juan Acha es parte de un “plan estratégico 2016-2019” del CCU Tlatelolco, lo que garantiza su protección tres años más.

Azpiri detalló que, después de la catalogación, el material se sometió a proceso de conservación y prevención de daños. “No venía en malas condiciones, sólo a algunos libros se les hizo trabajos de restauración y a los carteles de conservación”. Ahora todo el material está en condiciones de humedad e iluminación controlada, y las cartas, fotografías y carteles se conservan en guardapolvos y cajas especiales.

La apertura del archivo se hará en el marco del Coloquio internacional Juan Acha que organiza la UNAM en colaboración con el Centro Nacional de Investigación, Documentación e Información de Artes Plásticas, del 26 al 28 de octubre. Una de las actividades del programa Juan Acha 100, que conmemora el centenario del natalicio del también profesor.

Seminario de Investigación en Arquitectura, Magíster en Arquitectura / Escuela Arq. / Univ. Católica del Norte.

Magíster en Arquitectura / Escuela Arq. / Univ. Católica del Norte.

Seminario de Investigación en Arquitectura



Viernes 28 de octubre de 2016 /Lugar: Sala ÁS (Ángela Schweitzer)

9:45 / 11:30 hrs: Modera Claudio Galeno

Carlos Miranda
La representación del proyecto como crítica arquitectónica, el caso de Giovanni Battista Piranesi.

Augusto Angelini
Grillas Racionales: la influencia de la estructura reticular en la Arquitectura Moderna y Contemporánea.

Claudio Galeno-Ibaceta
Entre ruinas y pabellones: primeros devenires de una arquitectura latinoamericana en torno a las Exposiciones Universales

Valeska Cerda
Pérdida del vacío espacial público de los edificios modernos habitacionales, Antofagasta

Ronda de preguntas
11:30/11:45 Café

11:45 / 13:00 hrs.: Modera: Massimo Palme

Claudio Ostria
Desarme y traslado de casas patrimoniales en Antofagasta

Massimo Palme
Isla de calor urbana en ciudades de la costa pacífica de América del Sur: estudios de simulación en Chile, Perú y Ecuador.

José Guerra
Hábitat sustentable en comunidades aisladas en el litoral del desierto de Atacama: Caso de aplicación en la Caleta Constitución, Antofagasta, Chile

Preguntas

Fin de jornada.

2.10.16

Falleció el arquitecto Héctor Valdés Philips

El viernes 30 de septiembre falleció el destacado arquitecto chileno Héctor Valdés Phillips, uno de los socios de la destacada oficina de arquitectura Bresciani Valdés Castillo y Huidobro.


Conjunto Estadio en Arica publicado en la revista británica Architectural Design.

Los edificios que diseñaron juntos obtuvieron reconocimiento internacional, siendo publicado en importantes libros y revistas nacionales y extranjeras.

En el norte de Chile desarrollaron una parte importante de sus proyectos. En Arica realizaron la Población Chinchorro, el conjunto habitacional Estadio, el Estadio Carlos Dittborn, el Casino y el edificio Sudamericana de Vapores. En Iquique el conjunto Caranpangue. En Tocopilla el edificio Caja de Previsión de Carabineros. Para Antofagasta diseñaron el edificio del Servicio de Seguro Social, la Universidad Técnica de Estado y las viviendas para la compañía Anglo Lautaro. En Chañaral levantaron la destacada Hostería de HONSA.

Por el deceso, una serie de noticias han sido publicadas en la la prensa y en sitios web:

Colegio de Arquitectos de Chile: A los 98 años fallece el destacado arquitecto Héctor Valdés Phillips

Plataforma Arquitectura: Fallece Héctor Valdés, arquitecto histórico del movimiento moderno en Chile

Las Últimas Noticias: Héctor Valdés fue premio nacional de arquitectura. Falleció uno de los arquitectos de las Torres de Tajamar.

MoMA launches comprehensive online exhibition history

Vía Artdaily.


Latin American Architecture Since 1945. © MoMA.

NEW YORK, NY.- The Museum of Modern Art announces the release of an extensive digital archive accessible to historians, students, artists, and anyone concerned with modern and contemporary art: a comprehensive account of the Museum’s exhibitions from its founding, in 1929, to today. This new digital archive, which will continue to grow as materials become available, is now accessible on MoMA’s website, at http://moma.org/calendar/exhibitions/history.

Providing an unparalleled history of the Museum’s presentation of modern and contemporary art on a widely available platform, the project features over 3,500 exhibitions, illustrated by primary documents such as installation photographs, press releases, checklists, and catalogues, as well as lists of included artists. By making these unique resources available at no charge, the exhibition history digital archive directly aligns with the Museum’s mission of encouraging an ever-deeper understanding of modern and contemporary art and fostering scholarship.

“The Museum of Modern Art has played a crucial role in the development of an audience for modern and contemporary art for nearly 90 years,” said MoMA Director Glenn D. Lowry. “In making these materials freely available, we hope not only to foster and enable scholarship, but also to encourage a wider interest in this important chapter of art history that the Museum represents.”

The exhibition history project was initiated and overseen by Michelle Elligott, Chief of Archives, and Fiona Romeo, Director of Digital Content and Strategy, The Museum of Modern Art. Over the course of the last two-and-a-half years, three MoMA archivists integrated over 22,000 folders of exhibition records dating from 1929 to 1989 from its registrar and curatorial departments, performed preservation measures, vetted the contents, and created detailed descriptions of the records for each exhibition.

The digital archive can be freely searched, or browsed in a more structured way by time period or exhibition type. Each entry includes a list of all known artists featured in the exhibition. Artist pages likewise list all of the exhibitions that have included that artist, along with any of their works in MoMA’s collection online. The index of artists participating in Museum exhibitions now includes more than 20,000 unique names.

The Archives pages on moma.org now also include a list of the heads of each curatorial department since the Museum’s founding.

The underlying data has also been shared on GitHub (github.com), completing a trilogy of Museum of Modern Art datasets covering artworks, artists, and exhibitions dating 1929 to 1989. This data is in the public domain and can be sorted and analyzed, enabling one to, for example, search an artist's name to determine the number of exhibitions that have included their works, compile a list of exhibitions organized by a specific curator, or determine the frequency with which an artist has been exhibited at the Museum.

Depending on the archival resources available, an exhibition page may include installation photographs, an annotated exhibition checklist, multiple press releases, the full exhibition catalogue, and the list of participating artists. Special subsites created for MoMA exhibitions—the first of which was for Mutant Materials in 1995—are also included, as are slideshows, videos, and commissioned essays.

Among the landmark exhibitions that now feature the full complement of materials is Bauhaus 1919–1928, an expansive 1939 presentation organized by Herbert Bayer that was dedicated to the influential German school of art and design, five years after it was closed by local Nazi agencies. Other comprehensive pages include those for Eight Automobiles, the first in a series of auto shows in The Abby Aldrich Rockefeller Sculpture Garden, organized by Philip Johnson in 1951, and the 1980 blockbuster Pablo Picasso: A Retrospective, organized by Dominique Bozo and William S. Rubin. Among the exceptionally rich exhibition pages are those for the 1934 exhibition Machine Art, organized by Philip Johnson, and the renowned 1970 Information exhibition organized by MoMA curator Kynaston McShine.

As part of this project, exhibition catalogues were newly digitized. Beginning with the catalogue for the Museum’s very first exhibition, Cézanne, Gauguin, Seurat, Van Gogh, in 1929, the 800 catalogues now online offer decades of art historical expertise and the voices of curators and other figures, on topics ranging from architecture, design, painting, sculpture, drawing, and photography to media and performance art. Included are Modern Architecture (1932), which introduced the term “International Style”; Cubism and Abstract Art (1936), which established the terms through which whole generations approached modernist abstraction; Fluxus: Selections from the Gilbert and Lila Silverman Collection (1988-1989); and many others. Out-of-print book titles are generally accessible; current in-print titles are featured with excerpts and links to purchase the books.

“The project was conceived as a living archive rather than a one-off Web publication,” said Ms. Romeo. “It will be continually updated, with new and forthcoming exhibitions appearing in the history as soon as they’re added to the calendar on MoMA’s website. Additional primary documents will be added as they’re processed.”

Processing of the exhibition history archives was generously funded by the Leon Levy Foundation, which has also committed to underwriting the processing of additional records, from 1990 to 2000, over the next three years.

Ms. Elligott stated, “We are enormously grateful to the Leon Levy Foundation for their visionary support of this innovative project, which has created new resources that unlock access to documents and information about the Museum’s illustrious history of exhibitions. By exposing the unique and vital documents concerning these exhibitions, we strive to enhance and broaden the field of scholarship and to bring to the fore the many known and unknown stories in the Museum’s ever-evolving history.”

Future phases of the project will include thousands of film series presented by MoMA’s Department of Film over its 80-year history, a history of performance at MoMA and MoMA PS1, and the exhibition history of MoMA PS1.

Brasil abre una bienal de arte con tanta carga política como espiritual

Vía El País.

La trigésimo segunda edición muestra en São Paulo su versión más ecológica

Camila Moraes


La artista Iza Tarasewicz durante el montaje de la Bienal de São Paulo. Leo Eloy stúdio Garagem / Fundação Bienal de São Paulo

A la nueva edición de la Bienal de São Paulo, el festival de arte internacional que se celebra en la mayor ciudad brasileña, la recibe un mensaje escrito en una cabaña indígena: “Omame también es artista. Omame es artista del mundo entero. Omame es creador de todo lo que existe”. El texto es de David Kopenaway, chamán, líder de los yanomamis, un pueblo de indígenas aislado en el Amazonas, y autor de La chute du ciel ("La caída del cielo"); y avisa de que en los próximos tres meses de exposiciones, habrá 340 obras de 81 artistas o colectivos de 32 países intentando unir el cielo con la tierra. El tema central de esta edición, la trigésimo segunda, gira en torno a las incertidumbres de la vida, que es todo lo que necesita el arte para existir, y en la actualidad no son pocas: el mundo vive sumido en la inestabilidad, obsesionado por la política y preocupado por la ecología. Normal que busquen paz en la espiritualidad.

Jochen Volz, comisario jefe, asegura que lo que quiere esta Bienal —la más verde hasta la fecha— es celebrar el arte como lugar de resistencia y transformación, algo que vaya más allá de un panorama gris. "Comenzamos a trabajar en este proyecto en 2014, año en el que vimos un buen número de publicaciones sobre el fin del mundo tal como lo conocemos. Necesitamos pensar en el futuro de otra forma", explica este. Y esto era importante para la Bienal porque, según Volz, debe de funcionar como una "plataforma de experimentos".

En esta ocasión se experimenta con las tensiones entre lo natural y lo artificial, entre lo mortal y lo etéreo. Por ejemplo, todo el espacio que ocupa esta Bienal, en el enorme Parque de Ibirapuera, ha sido diseñado como un único jardín, sin jerarquías ni divisiones. Se empieza en lo natural, en un trayecto que comienza en un bosque de esculturas de madera de Frans Krajcberg, un artista ecologista polaco de 95 años que vive en el Estado brasileño de Bahía desde la década de 1970. Se llega después a Ágora: OcaTaperaTerreiro, una oca (cabaña indígena) creada por Bene Fonteles.

Lo único que está separado son los vídeos, por motivos obvios. Pero se unen a la exposición en tanto que también dan para quedarse un buen rato pensando cómo puede ser que los humanos, que somos un producto natural, nos sintamos artificiales ante la naturaleza. En O peixe (El pez, 2016), de Jonathas de Andrade, unos pescadores abrazan a sus peces hasta dirigirlos a la muerte; del vídeo editado en Everything and More ("Todo y más", 2015), la estadounidense Rachel Rose muestra la Tierra retratada por un astronauta. En forma de nosotros (2016) invita a imaginar los espacios moldeados por una bailarina. En Hell Yeah We Fuck Die (2016: son las palabras más usadas en los títulos de películas del pop), de Hito Steyerl, se ve a varios robots maltratados en pruebas.

Es difícil no sentir que algo está a punto de desmoronarse. Esto lo representa muy bien Chão ("Suelo"): una superficie de 627 metros cuadrados cubierta de tacos de madera con muelles en algunas partes, que el visitante puede recorrer para sentir inestabilidad al caminar y desconfiar del paisaje.

Porque no todo va a ser abstracto. En esta Bienal, pensar un país y un mundo mejores pasa necesariamente por llamar a la acción, como grita la Oficina de Imaginação Política (taller de imaginación política) que se mantendrá activo durante los tres meses de muestra, y también una serie de intervenciones espontáneas de artistas contra Michel Temer. El nuevo presidente, que asumió el cargo tras la polémica destitución de Dilma Rousseff a finales de agosto, ha sido el objeto de los mayores pasos a la acción. Ahí están, continuos, los gritos de “Fuera Temer” en el parque Ibirapuera. En Brasil, como en el mundo, como en la vida, la incertidumbre está lejos de acabar.